Un futuro esperanzador vinculado a los nuevos proyectos de renovables

El pasado 9 de julio, el Boletín Oficial del Estado (BOE) publicó la autorización a Endesa por parte del Ministerio para la Transición Ecológica para el cierre de la central térmica de Andorra y su posterior desmantelamiento.

La planta dejó de funcionar el 30 de junio, después de más de cuatro décadas de actividad en las que ha producido 224.000 GWh, equivalentes al consumo de electricidad peninsular durante un año.

Pero los planes de la compañía con respecto a Aragón siguen avanzando y son muchas las propuestas que hay encima de la mesa, con fecha fija de puesta en marcha. En el caso concreto de Andorra, el Plan de Futuro de la compañía incluye la recolocación de los 153 empleados de la central, así como dar total prioridad a la contratación de trabajadores de las actuales empresas auxiliares para el desarrollo de las actividades de cierre y desmantelamiento de la planta. Una actividad que se prolongará durante un periodo aproximado de entre 4 y 6 años, y que generará cerca de 130 empleos.

"En paralelo a la solicitud de cierre, Endesa ha presentado, de forma voluntaria un Plan de Futuro destinado a compensar los efectos del cierre a través de diversas medidas concretas para promover el desarrollo de actividades económicas y generación de empleo en la zona de la central", matiza Ignacio Montaner, director general de Endesa en Aragón.

Hasta el momento se han realizado seis cursos relacionados con el montaje de paneles solares y de supervisión, operación y mantenimiento de parques eólicos. También se ha llevado a cabo una formación dirigida a 50 alumnos, para trabajos relacionados con el desmantelamiento de la central.

Proyectos de futuro

En conjunto, el Plan Futur-e de Endesa, que se ha diseñado en tres fases y finalizará en 2026, prevé una inversión de 1.427 millones de euros y tiene como objetivo final la construcción de 1.725 MW de potencia, de los que cuales 1.585 MW corresponderán a plantas fotovoltaicas y 140 MW a parques eólicos. Adicionalmente, se instalarán 160 megavatios de almacenamiento en baterías.

La realización de estas instalaciones generará 4.014 empleos en la etapa de construcción y 138 empleos durante más de 25 años en las actividades de operación y mantenimiento de las plantas, según datos facilitados por la compañía.

La primera fase, que se iniciará en enero 2021 y finalizará a principios de 2022, contempla la construcción de un parque fotovoltaico de 50 MW (presentado a tramitación administrativa), que se construirá dentro del perímetro de la actual central térmica, y la construcción de un parque eólico, de 49,4 MW de potencia (presentado también a tramitación administrativa), que se instalará en Ejulve.

La segunda fase prevé impulsar 235 megavatios de energía solar fotovoltaica y 54,3 MW de almacenamiento en baterías, y se instalará, en gran medida, dentro del perímetro de la actual central térmica. Se desarrollará entre marzo de 2022 y junio de 2023.

Para las dos primeras fases, Endesa ya posee un punto de conexión, mientras que la tercera fase, de 1.390 megavatios, depende de la asignación por parte del Ministerio para la Transición Ecológica de la capacidad de evacuación de la central térmica de Andorra. Esta tercera fase arrancaría en mayo de 2023 y finalizaría a principios de 2026 y se construirían 1.300 MW de potencia fotovoltaica, 90 MW de energía eólica y 105 MW de almacenamiento en baterías. Se instalaría en Andorra, Alcorisa, Alcañiz, Calanda e Híjar.

Parques eólicos

Estos proyectos de energías renovables son adicionales a los que Endesa está realizando en Aragón. Concretamente, la compañía conectó a la red en 2019 trece parques eólicos situados en las provincias de Teruel y Zaragoza, con una potencia total conjunta de 424 MW.

Además, este año va a construir en Zaragoza y Teruel parques eólicos con una potencia total de 82 MW. Todas estas actuaciones de construcción de energías renovables vienen acompañados de sus correspondientes Planes CSV (Creación de Valor Compartido), diseñados junto con los agentes del entorno y su objetivo último es maximizar el impacto socio-económico que los proyectos tienen en la Comunidad. 

Una apuesta por la energía renovable

Descarbonizar. La puesta en marcha de estos proyectos que apuestan por incrementar la capacidad renovable responde a la estrategia de Endesa de descarbonizar su mix de generación en 2050, un proceso para el que, según el último Plan Estratégico de la empresa, se ha marcado el próximo hito de alcanzar 10,2 GW de capacidad instalada renovable en 2022, con una inversión total de unos 3.800 millones de euros.

Mayor capacidad. Endesa gestiona actualmente, a través de EGPE, más de 7.452 MW de capacidad renovable en España. De esta cifra, 4.701 MW son de generación hidráulica convencional; y el resto, 2.751 MW, son de energía eólica (2.306 MW), solar (352 MW), minihidráulica (79 MW) y otras fuentes renovables (14 MW).

En todo el mundo. En el Green Power, dentro del Grupo Enel, Endesa está dedicada al desarrollo y operación de renovables en todo el mundo. Además es líder global en el sector de energía verde con una capacidad gestionada de más de 46 GW en una combinación que incluye eólica, solar, geotérmica e hidroeléctrica, y está a la vanguardia de la integración de tecnologías innovadoras en plantas de energía renovables.

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