Calatayud, la cuarta localidad de Aragón por número de habitantes, cuenta con la gran baza, desde un punto de vista industrial, económico y social, de estar situada en un lugar estratégico del mapa aragonés y español, en el corredor Zaragoza-Madrid, y con conexión con el AVE, lo que permite que los viajeros puedan acercarse a Madrid en menos de una hora, a Zaragoza en 20 minutos y a Barcelona en menos de dos horas.

"Además, la cercanía a la zona del Corredor del Henares (Guadalajara, Alcalá de Henares y Madrid), así como al puerto de Valencia y a la Plataforma Logística de Zaragoza, garantiza una ventaja competitiva por la ubicación estratégica, la facilidad de acceso a los principales mercados nacionales e internacionales y una optimización y reducción de costes logísticos", indican fuentes del Ayuntamiento de la capital bilbilitana.

A todo esto hay que unir el potencial de sus polígonos industriales: La Charluca (224.000 m2); Mediavega (112.000 m2); Cuadras Esteras (78.000 m2) y Alto Paracuellos: 35.000 m2). En el caso de La Charluca, sus 78 empresas dan trabajo a más de 800 empleados y, en los últimos años, se han implantado más de diez nuevas. Además, en su futura ampliación, que superará los 400.000 m2, está prevista la implantación de grandes grupos empresariales.

En este sentido, el Consistorio bilbilitano, junto al de Paracuellos, ha mantenido varias reuniones con el Gobierno de Aragón para que la ampliación del polígono de La Charluca sea considerada como Plan de Interés General de Aragón (PIGA). "Ello permitirá reducir plazos administrativos y burocráticos en la urbanización de casi 70 hectáreas de terreno industrial, una política que va a ser clave durante los próximos años para el desarrollo empresarial de Calatayud", explican fuentes municipales.

Por su parte, en el polígono Mediavega, que tiene entrada y salida directa a la A-2 y N-234, hay instaladas un total de 65 empresas, la mayoría de ellas relacionadas con el sector servicios y de la construcción. Además, en Cuadras Esteras-El Padrejón, polígono de propiedad municipal y privada, es posible una ampliación de terrenos de casi 45.000 m2 y en el polígono Alto Paracuellos hay una parecela de 8.000 m2 de suelo industrial disponible y otras libres desde 800 m2. A todas estas instalaciones industriales habrá que sumar el futuro polígono San Antonio, más de 37.000 m2 de terreno perfectamente conectado con la autovía A-2 y el AVE.

Óptica y fotónica

Junto a todas estas infraestructuras industriales, el Consistorio quiere destacar el papel que jugará la futura Incubadora de Alta Tecnológica Óptica y Fotónica, un proyecto que está cofinanciado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional dentro del programa Operativo plurirregional de España Feder 2014-2020 PO. ‘Una manera de hacer Europa’. El presupuesto es de más de un millón de euros, con una cofinanciación de alrededor de 500.808 euros.

Por todas estas razones, Calatayud puede presumir de ser un excelente lugar para asentar nuevos proyectos industriales, ya que el Consistorio ofrece, además, subvenciones directas por inversión y creación de empleo de hasta 150.000 euros.

Entrevista con José Manuel Aranda, alcalde de Calatayud

H.A.

¿Cómo afronta Calatayud el nuevo curso político y qué retos se plantea?

Estos meses van a ser decisivos para el avance definitivo de varios proyectos estratégicos para Calatayud. En unos días comenzará la instalación de cargadores para vehículos eléctricos en distintos puntos de la ciudad. Vamos a dar respuesta definitiva a una reivindicación histórica de los vecinos del paraje de Marivella con el inicio las obras de saneamiento en este punto. Además, continuamos con mejoras urbanísticas en el casco antiguo, la renovación de una infraestructura clave como es el colector de saneamiento, las inversiones en patrimonio con nuevas obras en el Claustro de Santa María y, por supuesto, seguimos apostando por el ámbito social con inversiones en la residencia municipal.

Piden que la ampliación de la Charluca sea reconocida como Plan de Interés General de Aragón. ¿Por qué es importante?

En los últimos años hemos ido agotando la disponibilidad de suelo industrial y precisamos de más espacio que ofrecer a las empresas. La ubicación estratégica que ofrece Calatayud, con una magnífica conexión con la autovía A-2 y la estación de Alta Velocidad es un incentivo para las compañías que valoran positivamente nuestro emplazamiento logístico. Recientemente, hemos creado una nueva zona industrial en el barrio de San Antonio, pero requerimos de grandes extensiones de terreno para poder dar respuesta a proyectos más ambiciosos. Por eso estamos trabajando en esta ampliación, que con el reconocimiento como Plan de Interés General de Aragón podrá acotar plazos burocráticos y administrativos. Nuestro interés es compartir infraestructuras con la localidad vecina de Paracuellos.

¿Qué proyectos industriales trae el último trimestre del año?

Este mes abrirá sus puertas Levprot, un proyecto de biotecnología puntero que va a posicionar a nuestra ciudad en la investigación de proteínas de diagnóstico vegetal y farmacéutico. También finalizan las obras de sustitución de cubiertas en unas naves municipales donde ya ha comenzado a instalarse la empresa Infoyma, que contará con una plantilla superior a los 40 empleados.

¿Qué nos puede contar de Gevaresa?

Esperamos que la planta sea una realidad en el corto plazo, tras la finalización de trámites administrativos. Esta empresa de reciclaje de residuos de la construcción supone una apuesta por la economía circular y creará unos 20 puestos de trabajo. Por último, celebramos la ampliación que afronta Iberia Compositech, que duplicará su plantilla con la llegada de nuevos contratos internacionales. Mantenemos conversaciones para que en el corto plazo podamos anunciar la llegada de nuevos proyectos en materia industrial.

Se inicia un curso político de alto voltaje con problemas globales que también influyen en el ámbito local. ¿Cómo afronta los próximos meses como alcalde?

La compleja coyuntura que nos afecta y seguirá impactando en las familias durante los próximos meses nos obliga a estar más cerca, si cabe, de las personas. No estamos dispuestos a generar una carga añadida a los ciudadanos con ordenanzas y presupuestos municipales y, para ello, estamos trabajando en distintas medidas de ahorro. Además, vamos a adjudicar un contrato para la mejora de la eficiencia energética en todos los edificios municipales y un nuevo contrato de telefonía, que van a suponer un ahorro energético y económico relevante para el Ayuntamiento de Calatayud.