“Lo que aúna a los Vinos de las Piedras es el esfuerzo de viticultores y bodegas por el objetivo de la calidad”

Ignacio Casamitjana dejó su trayectoria profesional como responsable de gestión en distintas multinacionales para dedicarse a la viticultura. Desde 2017 es el presidente del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida Cariñena.

¿Cuáles son las señas de identidad de los Vinos de las Piedras?

Precisamente lo que nos diferencia frente a cualquier otra zona vinícola son las numerosas posibilidades de elaboración de nuestros vinos. La Denominación Cariñena tiene 14.000 hectáreas de extensión, pero es única porque en tan poca superficie se dan diferentes alturas, climatología y variedades muy distintas; el conjunto de factores que se conoce con la palabra francesa “terroir”. Por eso uno de nuestros principales proyectos es identificar y potenciar nuestros diferentes “terroirs”. Así, tenemos una extensísima gama de vinos, con tintos, blancos y rosados, y desde jóvenes a reservas. Lo que más aúna a los vinos de la Denominación de Origen Protegida Cariñena, los Vinos de las Piedras, más que entrar en especificaciones técnicas, es el esfuerzo de viticultores y bodegas por el objetivo de la calidad.

¿Y cómo está trabajando el Consejo Regulador de la Denominación para que sigan ganando en reconocimiento y mercados?

Al cierre de 2018, el 67% de nuestra producción se comercializó en el extranjero y el 33% en el mercado nacional. Por ello, una parte muy importante de nuestro trabajo son las campañas en terceros países. Reino Unido, Alemania, Estados Unidos y Rusia son nuestros principales clientes, pero no olvidamos ninguno de los 58 países en los que comercializamos nuestros vinos. Naturalmente, también destacan los eventos de promoción en España, entre los que sin duda uno de los más importantes es la nueva iniciativa que se está desarrollando ahora, el Festival de las Piedras. Queremos dar una vuelta más a las campañas en restaurantes, y resaltar una idea que en la Denominación Cariñena tenemos muy clara, que el vino es cultura, volvemos a unir nuestros vinos con actos culturales.

¿Cómo animaría a participar en esta campaña de promoción?

Diría a cualquier persona que va comer platos exquisitos, de la mejor gastronomía de Zaragoza, que van a estar maridados con vinos buenísimos. Si sumamos que además va a obtener el premio de una botella de vino o una entrada doble a una degustación exclusiva, creo que no hay mejor aval. Y si alguien todavía tiene el concepto de que los vinos de Cariñena son de mucha cantidad pero poca calidad, nuestros clientes avalan que esto ha cambiado hace ya más de veinte años y que los vinos de la Denominación de hoy en día son espectaculares. Que se acerquen, sin ningún miedo, y lo comprobarán.

Entre los proyectos en marcha de la D.O.P. Cariñena, Ignacio Casamitjana destacan dos que quedaron a la espera por la falta de presupuestos en los gobiernos nacional y autonómico y que se espera presentar en breve. El primero es la reforma del Museo del Vino de Cariñena, del que el presidente califica como “un proyecto muy interesante y vanguardista, que apuesta por generar y fijar empleo en la comarca”.

El segundo busca potenciar los vinos elaborados con la variedad cariñena, “el único caso de uva con el nombre de una denominación de origen, por eso queremos que sea un proyecto que quede en el tiempo, como marca diferencial y nuestra apuesta es total”.

Casamitjana subraya que se trabaja en tres líneas: la comercialización, la promoción y un foro internacional que una a todos los países con bodegas que elaboren vinos con al menos un 80% de uva cariñena, pero en el que se quiere mantener un enfoque propio: “Las bodegas de Cariñena ya están elaborando excelentes vinos con esta uva y el concepto que tenemos muy claro es que sean no solo vinos que utilicen esta variedad, sino vinos muy elaborados, de crianza y monovarietales”.