El tranvía va cogiendo el ritmo poco a poco. Un mes después del inicio de los test, el vehículo que se encuentra en pruebas ya ha logrado superar los 50 kilómetros por hora. En concreto, ha alcanzado los 57 kilómetros por hora a su paso por Vía Ibérica, calle que está siendo el gran banco de pruebas de este nuevo medio de transporte, por su longitud y situación, muy cerca de las cocheras de Valdespartera.

Los ensayos del tranvía están empezando a probar aspectos fundamentales como la aceleración o el frenado. En los paseos de los convoyes por el trazado, tres ingenieros controlan a bordo todos los parámetros desde cinco ordenadores, que están conectados con la computadora central de la máquina. Estos vigilan las respuestas del tranvía en las aceleraciones, las desaceleraciones y en los tres tipos de frenados: se trata de tres niveles que detienen el vehículo con diferente intensidad, desde una parada suave hasta otra muy brusca que consigue detenerlo en el acto, solo para casos de emergencia.

Conforme avancen las pruebas está previsto que el tranvía pueda alcanzar los 70 kilómetros por hora, el máximo al que podría llegar por capacidad. Sin embargo, cuando esté en servicio no pasará de los 50 kilómetros por hora, la misma velocidad que no pueden superar por norma el resto de vehículos. En su puesta en marcha circulará a una media de unos 20 kilómetros por hora, contando con el tiempo de las paradas -de hecho, por contrato hay que garantizar a la contratista una velocidad media de 19 kilómetros por hora-.

Las pruebas superaron ayer un nuevo límite, ya que pasaron de Vía Ibérica para introducirse en Isabel la Católica. Llegaron hasta el cruce con la calle de Luis Bermejo, justo antes de Fernando el Católico. Como siempre que se inaugura un tramo, el paso de los convoyes levantó expectación entre los ciudadanos, en una zona muy concurrida por la presencia del hospital Miguel Servet. El tranvía circuló únicamente por la vía de sentido entrada a la ciudad.

Treinta días de pruebas

De momento, los test no van a alcanzar el centro de la ciudad, ya que seguirán 'abriendo vía' por Valdespartera. En el nuevo barrio se ha completado la colocación de catenarias en la zona del inicio de la línea, hasta la que llegarán los convoyes próximamente. Habrá que esperar un poco más para que se paseen por Fernando el Católico y Gran Vía, donde aún no se ha terminado la electrificación.

Todos estos ensayos se están realizando, de momento, con un solo vehículo, el primero que llegó a las cocheras de Valdespartera desde la fábrica de CAF de la avenida de Cataluña. En el recinto habilitado en el nuevo barrio hay un tranvía más, y poco a poco irán llegando el resto hasta completar las once unidades previstas para esta primera fase, entre Valdespartera y la plaza de Paraíso. La primera unidad, la que está actualmente en pruebas, estará unos 30 días haciendo trayectos por la traza. El resto, poco a poco, irán bajado el número de jornadas necesarias para estar a punto.

Según fuentes de Los Tranvías de Zaragoza, las pruebas están siendo satisfactorias, y no han planteado ningún problema grave. Además de la aceleración y frenado se está comprobando el funcionamiento de aspectos como el aire acondicionado, la apertura de puertas, las luces, la prioridad semafórica... "Cada operación hay que ensayarla mucho", apuntaron ayer fuentes de la sociedad Los Tranvías de Zaragoza.

Además, los esfuerzos también están pasando por que tanto los peatones como el resto de vehículos aprendan a convivir con el tranvía. La campaña 'Para, mira, pasa' avanza conforme el tranvía extiende su zona de pruebas. Además, varias personas se encargan de indicar a los peatones las precauciones que hay que tomar. El Ayuntamiento ha recomendado a los viandantes que tomen con el tranvía "la misma precaución que con los automóviles", mientras que a los vehículos se les recuerda que no deben invadir la plataforma tranviaria y que deben tener precaución en los cruces.