El PAR, socio de gobierno del PSOE en el Ayuntamiento de Zaragoza, quiere que se replantee el trazado previsto para el tranvía en la segunda fase de las obras (entre la plaza de Paraíso y Parque Goya) para evitar que la infraestructura pase por la zona más sensible del Casco Histórico desde el punto de vista del tráfico: el entorno del Mercado Central, en la avenida de César Augusto. Es más, el portavoz aragonesista, Manuel Blasco, indicó que “el PSOE está dispuesto a estudiarlo” y que “el alcalde es receptivo”.

La propuesta no es del todo nueva. El alcalde, Juan Alberto Belloch, ha hablado en alguna ocasión en público de esta posibilidad con el objetivo de ampliar el apoyo social y político al tranvía. Y el PAR, junto al PP el único partido que se opone al tranvía de Zaragoza, ya planteó en el debate sobre el estado de la ciudad del pasado año una propuesta de resolución en este sentido, que finalmente quedó descafeinada tras unas tensas negociaciones con el PSOE, que rechazaba esa opción.

Pero ahora el PAR lo vuelve a ver viable y de hecho sugiere que el tranvía utilice el Coso Bajo, San Vicente de Paúl o el puente de Hierro para sortear el entorno del Mercado Central, aunque ese posible itinerario no estaría cerrado y se podría negociar.

La idea obligaría a rehacer el proyecto, que prevé que el tranvía transite hacia el norte de la ciudad por Independencia, el Coso Alto, César Augusto y el puente de Santiago. El Coso Alto y César Augusto quedarán cerrados para el tráfico privado y solo se permitirá el paso al transporte público. Además de alterar los planos, sería necesario revisar el equilibrio económico de la concesión, ya que se modificarían tanto los costes de la obra como los cálculos de demanda de viajeros, que sostienen la viabilidad del nuevo medio de transporte. También afectaría a los plazos: las obras deben empezar a mediados de 2011 y estar listas en 2013.

“En la zona del Mercado Central el tranvía ya de por sí podría originar conflictos. En el Casco Histórico desaparece prácticamente el tráfico rodado. Si pasa por el Mercado vamos a tener serios problemas, con independencia de que las asociaciones de vecinos y comerciantes han mostrado su rechazo”, afirmó Blasco. Considera que un cambio en el trazado podría posibilitar un mayor consenso social en torno a la obra. “Merecería la pena hacer un esfuerzo. ¿Por dónde podría ir el tranvía? Por donde mejor conviniera a todos y más consenso social hubiera”, declaró.

Admitió que la propuesta tiene dificultades, especialmente porque el contrato de las obras del tranvía incluye las dos fases de la obra, no solo la primera, que es la que se está ejecutando ahora. Manuel Blasco defendió la necesidad de negociar con el consorcio de empresas que se ha hecho con la construcción y la explotación de la primera línea de tranvía. “Es una idea que podría haber avanzado más rápidamente, pero no ha existido ese consenso para llegar a acuerdos”, reconoció.

El planteamiento de llevar el tranvía por el Coso Bajo nunca se ha estudiado desde el punto de vista técnico._En el estudio de alternativas que se presentó en 2006 para evaluar los distintos trazados no se planteó el paso por esa zona. Pero sí se evaluaron algunas opciones que evitaban el Mercado Central.

En concreto fueron tres, que optaban por el puente de La Almozara y no por el de Santiago para que el tranvía cruzara el Ebro. Una de ellas dibujaba el trazado por el paseo de María Agustín y Anselmo Clavé hasta llegar a Fernando el Católico por Goya. Las otras dos seguían por María Agustín hasta la Puerta del Carmen, donde se separaban: una tomaba Hernán Cortés y Cortes de Aragón para enlazar con Fernando el Católico y la otra seguía hasta Gran Vía para girar en dirección al sur de la ciudad. El trazado que se está ejecutando fue el elegido por garantizar el mayor número de viajeros.