El juez ordena prisión para el teniente jefe de la unidad antidroga de Málaga

El jefe de la unidad antidroga de la Guardia Civil en Málaga, Valentín F. F., ingresó ayer por la tarde en prisión por su presunta implicación en una operación contra el narcotráfico. El titular del Juzgado de Instrucción número 11 de la capital malagueña, Juan Francisco Ramírez Barroso, tomó esta decisión después de que el nuevo fiscal del caso propusiera esta medida cautelar para el teniente.

El mando del Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga fue detenido el jueves por agentes de la Unidad de Asuntos Internos que lo llevaban investigando durante seis meses, con vigilancias y escuchas telefónicas. En el momento de su arresto, los funcionarios le leyeron sus derechos por media docena de delitos, entre ellos favorecer el tráfico de drogas, omisión del deber de perseguir delitos, asociación ilícita, blanqueo de capitales y negociaciones prohibidas para los funcionarios. Además, los agentes de asuntos internos registraron su despacho oficial, en busca de documentación. El teniente Valentín F. F. se negó a declarar ante ellos y fue llevado ante el juez de guardia, que precisamente era el mismo que está instruyendo este caso, que ha sido declarado secreto. Tras escuchar sus explicaciones, el fiscal no pidió ninguna medida contra él y fue puesto en libertad con cargos.

Sin embargo, ayer, al hacerse cargo de la causa un nuevo fiscal, este decidió pedir la prisión para el oficial de la Guardia

Civil, cuya carrera se ha desarrollado en gran parte en la comandancia de Zaragoza. En la capital aragonesa ha estado durante una década en la Unidad de Policía Judicial y ha dirigido el grupo antidroga.

Las sospechas que recaen sobre él estarían relacionadas con la forma y los métodos empleados para investigar los delitos de narcotráfico. Esta manera de actuar estaría también en el origen de las detenciones de otros guardias a su cargo.