El socialista Juan Alberto Belloch ha sido investido alcalde de Zaragoza por mayoría absoluta con los votos de los diez concejales del PSOE, los tres de CHA y los tres de IU, con los que se ha mostrado a favor de pactar un gobierno.

En su discurso de investidura, Belloch ha dicho que está dispuesto a liderar un gobierno desde la izquierda y a tratar de alcanzar con CHA e IU un programa común, que permita unos acuerdos estables y sólidos que den lugar a «un gobierno a tres bandas».

Y lo ha demostrado recogiendo en su discurso todas las peticiones que para garantizar su apoyo a la investidura les han exigido estos últimos días desde CHA e IU.

Entre otras, la normalización del pago a los pequeños y medianos proveedores, el mantenimiento del empleo público, una política fiscal basada en la progresividad y el mantenimiento de las prestaciones sociales y una política de vivienda de consolidación de la ciudad.

En el ámbito de la movilidad, se ha comprometido a terminar la línea 1 del tranvía y a suscribir este año un convenio con el Ministerio de Fomento para impulsar la red de cercanías.

Asimismo, a buscar el diálogo y la cooperación con el PP en aquellos temas que sean de interés general, entre ellos, lograr la Ley de Capitalidad.

Belloch tampoco ha olvidado al movimiento 15-M, cientos de cuyos seguidores se han concentrado a las puertas de la Casa Consistorial para recordar al alcalde sus reivindicaciones, y ha asegurado que se trata de un fenómeno que hay que «observarlo, analizarlo y tomárselo en serio».

«No podemos permanecer impasibles cuando miles de jóvenes nos están gritando que se sienten excluidos de nuestro sistema representativo y de nuestro modelo económico», ha precisado Belloch, quien quiere aprovechar «lo que está pasando» para acometer una «profunda reforma» de los mecanismos de participación ciudadana.

También aprovechará para agilizar el funcionamiento de la administración e incrementar la transparencia y seguir avanzando hacia los grandes objetivos estratégicos de Zaragoza para convertirse en una gran ciudad, sostenible, innovadora, socialmente cohesionada y bien posicionada en el mundo.

Belloch también ha reconocido al PP como fuerza mas votada en las elecciones y ha asumido la responsabilidad por los malos resultados, que ha atribuido a no haber sabido adaptar las prioridades a la crisis económica, ni hacer una pedagogía moral, ni comprender que las ciudad necesitaba repensar su modelo de desarrollo, y que los grandes eventos debían dejar paso a la prioridad de asentar lo ya realizado.

En su investidura, Belloch ha estado arropado por el presidente en funciones del Gobierno de la Comunidad autónoma y secretario general del PSOE en Aragón, Marcelino Iglesias; el hasta ahora presidente de las Cortes autonómicas, Francisco Pina; y la consejera en funciones de Presidencia y cabeza de lista del PSOE en als elecciones del 22-M, Eva Almunia.

Belloch, natural de Mora de Rubielos (Teruel) y de 62 años, inicia así su tercer mandato al frente del Ayuntamiento de Zaragoza, la quinta ciudad de España y la única de entre las grandes ciudades que estará dirigida por el PSOE.

Previamente, los concejales electos han prometido o jurado su cargo con una frase protocolaria que se han saltado los tres ediles de IU, quienes se han manifestado como «ciudadanos partidarios de un estado republicano», mientras desde las filas del PP han rehusado aplaudir en la imposición de las bandas de los ediles.

Belloch gobernará de momento con un equipo de diez concejales a la espera de poder alcanzar un pacto de gobierno o un acuerdo de legislatura con CHA e IU, partidos que están a la espera de los compromisos que adquiera el alcalde.