RECUPERACIÓN DEL HUMEDAL

La vegetación de la laguna del Cañizar será controlada con caballos salvajes franceses

La manada llegará las próximas semanas al humedal, situado en los términos de Villarquemado y Cella.

Visitantes recorrían ayer el perímetro habilitado en la laguna para el paseo.
La vegetación de la laguna del Cañizar será controlada con caballos salvajes franceses
JORGE ESCUDERO

El crecimiento de la vegetación de la laguna del Cañizar, un humedal situado en los términos municipales de Villarquemado y Cella, será controlado con la presencia de caballos salvajes de la región francesa de la Camarga, una raza de equinos adaptada a un hábitat de aguas pantanosas.


Este proyecto constituye la actuación más inmediata que pondrá en marcha la recientemente constituida Fundación Laguna del Cañizar, una entidad integrada por los ayuntamientos de los dos pueblos en cuyos términos se ubica la laguna y que será presidida alternativamente por sus respectivos alcaldes.


El actual presidente, el primer edil de Villarquemado, Federico Serrano, señaló que dentro de unas semanas se trasladarán al humedal diversos ejemplares de este tipo de caballos franceses, cedidos por un parque natural del Ampurdán (Gerona), con el objetivo de comprobar su adaptabilidad al nuevo medio. Si la experiencia resulta positiva, la Fundación estudiará la posibilidad de adquirir una manada o bien suscribir un convenio con «algún ganadero», según manifestó Serrano, con objeto de garantizar la presencia de estos animales en la zona húmeda turolense.


El presidente considera que esta acción «es urgente» porque el crecimiento desmesurado de las plantas «comienza a ser un problema para el anidamiento de las aves y para el hábitat, en general». La Fundación se inclina por la vía del pastoreo como el sistema más adecuado para el control de la vegetación, después de desestimar otros procedimientos más agresivos con la naturaleza como los incendios controlados o los medios mecánicos.


La laguna del Cañizar, recuperada tras permanecer trescientos años desecada por acción del hombre, se está convirtiendo en un interesante recurso para la zona. Federico Serrano señaló que alrededor de 15.000 personas han visitado el humedal en el último año, a su juicio, una cifra importante si se tiene en cuenta que hasta ahora no se ha hecho una campaña de difusión de relevancia. «Sorprende -subrayó- la cantidad de fotografías sobre la laguna que la gente ha colgado en la red. Hay foros de ornitólogos europeos repletos de imágenes del Cañizar».


Para Federico Serrano, la presencia de visitantes «va a más», y sostiene que el enclave experimentará un nuevo impulso cuando se pongan en marcha los recorridos guiados en barca, un proyecto que se espera iniciar a partir de este verano.


«Creo que constituirá un nuevo aliciente, porque se podrá conocer la riqueza de la laguna por dentro y algunos de los doce islotes que salpican sus aguas», explicaba el primer edil, quien advirtió, no obstante, de que las visitas se articularán de forma restringida con objeto de evitar el impacto en la flora y la fauna, sobre todo, en los periodos de cría de las aves.


Estos trayectos se realizan mediante una barca que se adquirió el año pasado en la Albufera de Valencia y cuyo uso se ha limitado hasta ahora a las labores de mantenimiento del personal del lago.


Serrano explicó que si bien se ha avanzado notablemente en el proyecto de la recuperación del Cañizar -una intervención de la Confederación Hidrográfica del Ebro-, todavía queda mucho por hacer para su aprovechamiento integral. Agregó que las previsiones pasan por incrementar el número de observatorios y los senderos a los largo del perímetro de la laguna, «de manera que los visitantes puedan permanecer todo el día en este entorno».


La Fundación, cuya gerencia ocupa José Carlos Rubio -uno de los principales impulsores de este proyecto-, arranca con 34.000 euros y los ayuntamientos de Villarquemado y Cella como únicos miembros, aunque Federico Serrano señaló que la entidad está abierta a otras administraciones y empresas.