Médicos de familia: ¿Médicos de segunda?

Los graduados que aprueban el MIR optan antes por las especialidades quirúrgicas y dejan en un “segundo plano” la Atención Primaria.

Médicos de Familia: ¿Médicos de segunda?
Médicos de Familia: ¿Médicos de segunda?

¿Qué tendrá un quirófano que atrae tanto? A diario se hacen series de televisión ambientadas en hospitales y servicios de urgencias, la carrera de Medicina es la más elegida por los estudiantes aragoneses y la mayoría de las especialidades estrella del MIR están relacionadas con el ámbito quirúrgico. Sin embargo, en medicina hay mucho más que cirugías. Los profesionales de la Atención Primaria se sienten, en ocasiones, “relegados a un segundo plano” y piden que se ponga en valor esta especialidad.

“Al acabar la carrera, la mayoría de graduados se interesa más por una especialidad hospitalaria y la Primaria queda relegada. Casi como si fuéramos médicos de segunda categoría”, se lamenta Carmen Puig, coordinadora del Centro de Salud Actur Norte de Zaragoza y vocal de Atención Primaria en el Colegio de Médicos de la capital aragonesa.

“Es cierto que, ante estos datos, puede dar la sensación de que Medicina de Familia es una especialidad de segunda”, corrobora Jonathan Alonso, de 30 años, que es médico residente de tercer año en la especialidad de Medicina Familiar y Comunitaria en el Hospital San Jorge de Huesca. “Pero nada más lejos de la realidad, ya que es la base de toda la medicina y cubrimos, globalmente, la salud del paciente”, añade Alonso, quien reconoce que esta situación se da incluso a la hora de elegir plaza en el MIR. “Hasta el punto de que sorprende cuando alguna de las notas más altas opta por Medicina de Familia en lugar de por alguna de las especialidades estrella como Cirugía Vascular o Cardiología”, reconoce este médico residente.

¿Un futuro sin médicos de familia?

A esto se añade una falta de estos facultativos en la bolsa de trabajo para cubrir las eventualidades de los titulares en el periodo estival. “Este verano nos hemos encontrado con que, en algunos centros, no hay ningún médico de familia para cubrir vacaciones y tenemos que estar sustituyéndonos entre los mismos miembros del equipo”, informa Carmen Puig.

A Jonathan Alonso le queda solo un año y medio para acabar su residencia. Cuando lo haga, pasará a formar parte de esta bolsa de trabajo. Una vez allí su objetivo es “ir acumulando puntos a base de experiencia, cubriendo bajas y vacaciones, ya que la persona que más puntos acumula es la primera en elegir destino entre los distintos puestos de trabajo que se ofertan”, explica este residente.

El problema no es solo coyuntural, durante los meses de julio y agosto, sino que esta situación puede llegar a ser estructural. “La falta de médicos que hoy es un problema para cubrir eventualidades, mañana lo puede ser para cubrir jubilaciones”, dice Puig. “La población está envejeciendo por lo que requiere una mayor atención médica. Retrasar la edad de jubilación de los médicos de familia a los 67 años no es suficiente. Hace falta crear nuevas plazas para cubrir lo que dentro de 5 años va a ser una realidad: la escasez total de estos facultativos”, concluye la coordinadora de C.S. Actur Norte.

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