Los dermatólogos advierten de que el sol no mejora el acné

Con la campaña 'Salud y Sol', la Academia Española de Dermatología aclara que el sol es perjudicial para aquellos que padecen esta enfermedad inflamatoria.

Lo recomendable es protegerse cada dos horas cuando se está tomando el sol.
Lo recomendable es protegerse cada dos horas cuando se está tomando el sol.

Los especialistas en dermatología han advertido hoy a los jóvenes adolescentes, la mayoría de los cuales padece acné -casi un 80 %-, que esta patología de la piel no mejora con el sol ya que, aunque inicialmente las lesiones se secan, posteriormente produce un efecto rebote.


Es un mensaje en el que incide la campaña 'Salud y Sol', de Avène, en colaboración con la Academia Española de Dermatología, que ha sido presentada hoy y que este año profundiza en la exposición solar durante la adolescencia y especialmente en los jóvenes que padecen esa enfermedad inflamatoria de las glándulas sebáceas, que se encuentran sobre todo en la cara, pero también en el pecho, la espalda y los brazos.


La dermatóloga Ariadna Ortiz, directora médica de los laboratorio de Pierre Fabre, ha querido desmontar este mito sobre el sol y el acné, que provoca lesiones en la piel dolorosas y desagradables a veces para los adolescentes, pero también que pueden provocarles un impacto psicológico.


"El sol se piensa que mejora el acné e inicialmente lo hace porque es un potente antiinflamatorio y seca las lesiones, pero después del verano desaparece este efecto y rebota el acné. Además, el sol también incrementa la capa córnea, y esto hace que haya más riesgo de inflamación de las lesiones", ha explicado a Efe Ortiz.


Por ello, con esta campaña, los dermatólogos han hecho hincapié en los jóvenes para que se protejan de las radiaciones solares y en especial en los que padecen acné que "deben aplicarse fotoprotectores que tengan seborreguladores, que limiten la producción excesiva de sebo en su piel".


Los especialistas además les aconsejan que después del verano utilicen tratamientos queratolíticos, con fármacos que disuelven total o parcialmente la capa córnea de la piel y que actúan como una especie de peeling sobre la misma, liberando el poro.


Pero "el sol no sólo no mejora el acné, sino que -asegura Ortiz- puede causar envejecimiento cutáneo, manchas o cicatrices". Con esas palabras se dirigen los dermatólogos a los jóvenes ya que los últimos estudios indican que para llegar a los adolescentes es más efectivo centrarse en las consecuencias negativas del sol a corto plazo que a largo.


"Los jóvenes no ven el peligro que ven ahora los mayores en el sol. Viven el presente y no piensan a largo plazo. Pero además es que no lo han convertido en un habito saludable y hay que inculcárselo con argumentos, sin imponérselo", ha explicado a Efe la psicóloga Patricia Ramírez.


Por tanto, según Ramírez, para que los jóvenes se protejan de forma adecuada "no sirven los mensajes catastrofistas como que 'si no te proteges vas a tener de mayor cáncer de piel'" porque "no lo relacionan de forma inmediata con ellos".


Para concienciarles de la importancia de la protección solar, los psicólogos recomiendan a los padres que les expliquen cómo lo deben hacer y cuándo, y motivarles para ello.


"Una manera de conseguir esa reflexión por su parte es que ellos investiguen en internet, porque se van a creer más lo que ellos vean y descubran que lo que nosotros les impongamos", ha señalado la psicóloga.


En esas 'investigaciones', los adolescentes sí que podrán ver muchas veces el término de "cáncer de piel", porque no hay que olvidar que "en los primeros 20 años se reciben las radiaciones que luego pueden ocasionar" esta patología.


Actualmente, según la dermatóloga, se están atendiendo los cánceres de piel por el sol acumulado en exceso hace 20 años, cuando "nadie se protegía de las radiaciones solares, ni usaba la ropa adecuada para evitarlas".


Los dermatólogos quieren que estos mensajes calen en los jóvenes porque sólo la mitad de ellos se protege del sol, "lo que es bastante deficitario", pero además es que muchos de los que lo hacen no se aplican los protectores adecuadamente.


Para una protección correcta hay que aplicarse fotoprotector cada dos horas y cubrir todo el espectro de las radiaciones solares, con dos miligramos por centímetro cuadrado, según los expertos.


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