Un avión de la base de Zaragoza traslada al misionero español García Viejo, enfermo de ébola

El aparato, un T.10 (C-130 Hércules), ha sido adaptado a la misión de transporte sanitario.

 Manuel García Viejo, el religioso y médico del Hospital San Juan de Dios de Lunsar (Sierra Leona), infectado de ébola, llegará a España en las próximas horas después de que partiera del aeropuerto de Torrejón de Ardoz (Madrid) el avión medicalizado que le repatriará.


Está previsto que Manuel García, de 69 años, los doce últimos como director médico de la Orden en Lunsar, llegue a Madrid el lunes, entre la madrugada y la mañana, en el avión Hércules medicalizado que despegó a las 07.17 horas desde Torrejón y que llegó a Freetown (Sierra Leona) en la tarde de este domingo.


En el avión viajan dos tripulaciones, integrada cada una por un piloto, un copiloto, un navegante y un auxiliar (ocho personas en total) más dos equipos médicos formados por un comandante médico, un capitán enfermero y un cabo 1º y un auxiliar de enfermería (seis en total, todos militares).


El aparato un T.10 (C-130 Hércules) del Ala 31 de Fuerzas Aéreas del Ejército del Aire con base en Zaragoza, se ha adaptado a la misión de transporte sanitario en la base aérea de Torrejón.


Para ello, según ha detallado el Ministerio de Defensa, se ha instalado una cámara para aislar temporalmente a enfermos contagiosos, que proporciona la máxima protección al paciente y al personal sanitario que lo trata, así como un sistema de soporte vital para la monitorización del enfermo en todo momento.


Asimismo, se han cargado otras dos cámaras de aislamiento (una segunda de reserva, ya montada, y otra más sin montar, con carácter preventivo) y material médico diverso con un total de 1.200 kilos.


Las tripulaciones, sanitaria y de vuelo de cabina, van protegidas con monos impermeables que cubren de los pies a la cabeza, más gafas, mascarilla, guantes y calzas, para aislarlas de fluidos o partículas contaminantes en el área de trabajo próxima al paciente infeccioso, que previenen el contagio.


Está previsto que, tras su llegada a Madrid, García Viejo sea recibido por personal de Sanidad Exterior, que entregará al paciente al personal sanitario de la Comunidad de Madrid, y será trasladado, siguiendo el protocolo de seguridad, al complejo hospitalario La Paz-Carlos III.Segunda repatriación


Es la segunda vez que el Gobierno pone en marcha un protocolo de repatriación ante un caso de un español infectado por ébola, tras el seguido en agosto con su compañero de orden religiosa, el sacerdote Miguel Pajares, que llegó a Madrid el 7 de agosto desde Monrovia y falleció en el citado hospital seis días después.


El hermano Miguel Ángel Varona, encargado de la ONG que gestiona la cooperación internacional de la Orden San Juan de Dios, ha explicado que el enfermo está ahora estable y que los síntomas de la enfermedad, que se le diagnosticó el pasado viernes, son por ahora fiebre y diarrea.


"Fuera de serie", "enamorado de África" y una persona que se "emperrará" en volver a dicho continente cuando consiga vencer la enfermedad, son algunas de las expresiones que le ha dedicado Varona en una entrevista.


Según Varona, García Viejo, médico especializado en enfermedades tropicales, lleva treinta años de trabajo en África, y es una persona "muy amigable, sencilla, dispuesta a ayudar, no busca problemas, siempre intentando dar soluciones".


Al igual que ocurrió con el primer caso de un español contagiado con ébola, la Federación de Asociaciones para la defensa de la Sanidad Pública ha denunciado las condiciones del hospital Carlos III para atender este tipo de casos.


En un comunicado, ha indicado que desde el anterior "no se hayan llevado a cabo actuaciones de recuperación" en el Carlos III, que no cuenta con un laboratorio "capacitado para analizar muestras" y que deben enviarse a La Paz.


Asimismo, ha criticado que "llama la atención el despliegue de recursos para en traslado, mientras que prácticamente se han suprimido los fondos destinados a la cooperación internacional", y ha advertido de que mientras no se controle la epidemia en África "la probabilidad de que la enfermedad llegue a nuestro país continúa estando presente".