Jaca, un paraíso para disfrutar del turismo de invierno

Ocio, cultura y naturaleza en un mismo lugar del Valle del Aragón.

La entrada al paraíso nevado del valle del Aragón se hace a través de una joya románica, marcada por la gastronomía, los deportes de invierno y el Camino de Santiago. Sin duda, se habla de Jaca, la capital de la comarca de la Jacetania que cuenta con un entorno esquiable de más de 250 kilómetros. Ubicada a apenas media hora de las estaciones del valle del Aragón, esta localidad se ha convertido en el destino principal para disfrutar del ‘après ski’.

Jaca es más que un alto en el camino, es un destino turístico para amantes y no amantes del esquí gracias a sus propuestas.

Un legado de más de dos mil años de historia

El patrimonio artístico jacetano no deja indiferente ni a visitantes ni a habitantes. El puente medieval de San Miguel o la Ciudadela de Jaca son solo algunas muestras del precioso legado que ha dejado la historia de la ciudad. El románico es, sin duda, el estilo que impera en la mayoría de representaciones. De hecho, posee una de las primeras catedrales de esta corriente del país.

Otros estilos también tienen representación en Jaca y algunas de sus construcciones significativas son la Casa Consistorial, el Monasterio de las Benedictinas, el Fuerte de Rapitán, la Torre del Reloj o su ruta de edificios modernistas. En su término municipal hay que destacar el Monasterio de San Juan de la Peña del siglo X, cuna del primitivo Reino de Aragón. Un paseo por la ciudad y sus alrededores es un viaje por la historia.

Jaca festiva

Las tradiciones y fiestas forman parte del día a día de Jaca y, aunque es para fechas concretas cuando se celebran sus festividades patronales, en esta localidad jacetana siempre hay motivos para festejar. Sus días grandes son sus fiestas en honor de Santa Orosia, que tienen lugar a finales de junio.

La celebración del Primer Viernes de Mayo, con un multitudinario desfile, el Festival Folclórico de los Pirineos, la Semana Santa y el Festival Internacional en el Camino de Santiago son otras citas en el calendario festivo.

Una localidad que vive por y para el deporte y el relax

Su situación convierte a Jaca en un paraíso para el deporte y el relax. Gracias a su Pabellón de Hielo, podría ser denominada como la ‘capital del hielo’, ya que se trata de unas instalaciones únicas en España para disfrutar del patinaje. Allí se dan cita tanto aficionados y profesionales que buscan deslizarse por el hielo, como equipos deportivos. Así, el patinaje libre, el ‘curling’, el patinaje artístico y el ‘hockey’ sobre hielo son las actividades que pueden disfrutarse y vivirse bajo la impresionante cúpula.

El entorno natural del que goza Jaca permite la realización de diversas experiencias en plena naturaleza. El senderismo, el cicloturismo, las rutas BTT, el ‘trecking’, las excursiones a caballo, los deportes de aventura (como el ‘rafting’ o el descenso de barrancos), el golf y la escalada son algunas de las múltiples propuestas que ofrece este enclave, además de los deportes de nieve.

Además, tras el ocio y la aventura, nada mejor que una sesión de ‘wellness’. Para eso, el Centro de Piscinas, Spa y Fitness de Jaca oferta una amplia gama de servicios para cuidar la salud de todos.

La gastronomía jaquesa

Descubrir Jaca también es adentrarse en el apasionante mundo de su gastronomía. Allí, los productos locales son los protagonistas: embutidos, quesos, galletas, huevos y licores inundan las mesas de los comensales. El postre puede degustarse en alguna de sus centenarias pastelerías. Una de las opciones para degustar todos estos productos y, además, contagiarse del espíritu culinario que se respira en la ciudad es su concurso de tapas. La cita se celebra en la segunda mitad de octubre.

Un destino para los niños

La ciudad es un destino familiar y los más pequeños disponen de diversas opciones para disfrutar. La Ciudadela, una visita indispensable en la ciudad, apuesta por los niños con su programa Ecociudadela, con visita a los ciervos que allí habitan y se les puede dar de comer y acariciar. Los parques faunísticos o de ocio (tirolinas, ‘kayak’...) son otras opciones, como el Parc’Ours en el Valle del Aspe o el Ecoparque el Juncarral, en Villanúa. En esta localidad también se puede visitar la Cueva de las Güixas, donde además de conocer el espacio, se puede realizar una ‘murci-visita’ para observar murciélagos.

Un paso natural por el Camino de Santiago

Ya en el siglo XI, cientos de peregrinos europeos llegaban a este municipio, convirtiéndolo en la primera ciudad del Camino de Santiago. Así, Jaca forma parte del ‘camino histórico’ que también atravesaba Canfranc. De hecho, la existencia de la catedral románica de Jaca solo se explica por la importancia de la ruta jacobea y por la necesidad de dotar de un ostentoso poder religioso a la capital del Reino de Aragón, proclamada por el rey Sancho Ramírez.

Jaca forma parte de dos etapas del Camino de Santiago que pueden suponer una entretenida excursión para los visitantes. Allí descubririán otras localidades, cercanas y muy pintorescas, como Santa Cilia de Jaca, Villanúa o Santa Cruz de la Serós.

Un entorno inigualable

Pueblos con encanto, valles, bosques y fauna. Algunas de las localidades cercanas que merecen una visita son Canfranc, así como los municipios de los valles de Hecho y Ansó. También es posible disfrutar de la naturaleza sin salir de Jaca. A pie o en bici, el camino desde el Árbol de la Salud hasta el cementerio en el Llano de la Victoria es una ruta más que recomendable. Otro espectacular paseo es el de la Constitución.

- Ir al especial 'Nieve en Aragón'