SUDÁFRICA 2010

Zaragocistas en la Roja

Reija, Lapetra, Marcelino, Señor, Villarroya y Pardeza, zaragocistas y mundialistas con España.

Villarroya disputa un balón.
Zaragocistas en la Roja
HA

Son la huella del Real Zaragoza en las selecciones españolas presentes en una Copa del Mundo. Trozos de historia del club aragonés y también de la Roja. Testigos de unos tiempos en los que el Real Zaragoza poseía, con más o menos fuerza, un peso importante en los planes de los seleccionadores. El incombustible Reija, el insaciable Marcelino Martínez, el genio Lapetra, la geometría de Juan Señor, la astucia de Pardeza y los pulmones de Villarroya. Ellos representaron alguna vez a España y al Real Zaragoza en una Copa del Mundo. Quizá el grupo, tan solo seis en toda la historia de los Mundiales, refleja con exactitud la ciclotimia del Real Zaragoza, esa excesiva inestabilidad que ha marcado su vida, alternando equipos legendarios e inolvidables con años de aridez y mediocridad.


Ningún futbolista del Real Zaragoza defiende a España en una Copa del Mundial desde Italia 90, hace 20 años. Entonces, Francisco Javier Villarroya y Miguel Pardeza consumieron minutos en el equipo de Luis Suárez. Ambos son los últimos de esa lista abierta en Chile 1962 por Severino Reija, el único futbolista del Real Zaragoza que ha jugado dos Copas del Mundo con España.


Lateral izquierdo portentoso, infatigable en la banda, pegajoso defensor, Reija formó parte de una selección española de chasis seductor: Di Stefano, Puskas, Gento, Luis Suárez, Del Sol, Peiró, Collar… Pocas selecciones españolas, quizá solo la actual, han aglutinado tal dimensión de talento. Era un equipo en el que la base se alimentaba del Real Madrid tiránico de las Copas de Europa y de estrellas del Calcio como Peiró (Torino), Suárez (Inter) y Del Sol (Juventus). Sin embargo, España fracasó y se despidió de Chile en la primera fase. La Brasil de Garrincha, Zagallo, Vavá y Didí –Pelé se lesionó al comenzar el Mundial-, Checoslovaquia y México eran los acompañantes de grupo de España. Reija tan solo jugó contra los checoslovacos en la derrota inaugural, pero el lateral gallego comenzaba a labrarse una carrera en la selección que se alargaría hasta 1967 y que le permitiría acudir cuatro años después a la Copa del Mundo de Inglaterra 1966.


Eran los años apoteósicos del Real Zaragoza de los Magníficos, tiempo de títulos, fútbol mágico, imborrable. En la cita se reunieron con Reija, Marcelino Martínez, héroe nacional tras marcar dos años antes el gol que le otorgó a España la Eurocopa de 1964 ante la Unión Soviética, y el genial Carlos Lapetra. Tres futbolistas del Real Zaragoza defendiendo a España en un Mundial. Pero pudieron ser más. En la preselección, también tuvieron hueco Juan Manuel Villa y José Luis Violeta, finalmente descartados por el seleccionador José Villalonga. De nuevo, España se presentaba en un Mundial con un grupo prometedor, con Iríbar, Sanchís, Gento, Luis Suárez, Pirri, Del Sol, Amancio… Sin embargo, la fase de grupos volvió a convertirse en la tumba de la selección. Dos derrotas ante Argentina y Alemania mandaron a casa a España, que solo se impuso a la débil Suiza. Reija fue titular excepto en el partido inaugural ante Argentina, y en el último encuentro, por única vez en la historia, tres jugadores del Real Zaragoza fueron titulares en un partido de España en el Mundial. Fue en el estadio Villa Park de Birmingham. Reija, Lapetra y Marcelino salieron en el once que cayó ante Alemania en el encuentro decisivo. Los germanos, subcampeones del torneo tras perder en la final ante Inglaterra, tumbaron a España con una selección en la que brillaban Uwe Seeler, Franz Beckenbauer, Wolfang Overath y Lothar Emmerich. Lapetra lució el número 22, Marcelino su inseparable 9 y Reija, que poco después sería capitán de España, el 15.


Mucho tiempo transcurrió hasta que el Real Zaragoza volvió a tener presencia en una selección española mundialista. Las eliminaciones en las fases de clasificación de las Copas del Mundo de 1970 en México y 1974 en Alemania privaron a Violeta de participar especialmente en la edición azteca, ya que era un habitual con España. Tampoco hubo zaragocistas en las selecciones que acudieron a Argentina 1978 y a la edición organizada por España en 1982. Juan Señor, que comenzaba a destacar en el Real Zaragoza y cuya presencia en la lista de José Emilio Santamaría se daba por segura, se cayó de esa selección y no debutaría con España hasta el partido inmediatamente posterior a la cita mundialista, ya con Miguel Muñoz en el banco. No se perdería Señor la cita de México 1986. Después de convertirse en una pieza esencial en España en el periodo 82-86, Señor, empleado con interior, lateral o cerebro organizador, acudió a México con uno de los futbolistas nucleares del vestuario de la selección, en la que la Quinta del Buitre anunciaba un relevo generacional. Señor no fue titular en ninguno de los partidos, pero fue uno de los relevos habituales en las segundas partes. De eso modo, jugó en la primera fase ante Brasil, el día del gol fantasma de Míchel en la derrota 1-0, y en las victorias ante Irlanda del Norte (2-1) y Argelia (3-0). No disputó el cruce de octavos, en el éxtasis de Butragueño ante Dinamarca y fue vital saliendo desde el banquillo en cuartos: un gol suyo, un zurdazo en una jugada ensayada a cinco minutos de final, empató el partido. La tanda de penaltis, con aquel fallo de Eloy, fue el punto final de España en México. Uno de los pilares de esa selección era el aragonés y ex zaragocista Víctor Muñoz, pulmón del Barcelona de la época,


Cuatro años después, el Real Zaragoza volvió a tener presencia relevante en la Copa del Mundo de Italia. Luis Suárez citó a Francisco Villarroya, que poco después firmaría por el Real Madrid, y a Miguel Pardeza. Villarroya ejerció un papel fundamental en aquel equipo como carrilero izquierdo de largo recorrido. Jugó de titular los cuatro partidos de la selección española en ese Mundial: Uruguay, Corea del Sur, Bégica y Yugoslavia.


Más efímera fue la participación de Pardeza, que apenas jugó tres minutos en la victoria 2-1 ante Bélgica. Butragueño, Julio Salinas y Manolo les restaban opciones en la delantera de España.