La comisión negociadora la forman el secretario general, Antonio Cosculluela; la de Organización, Elisa Sancho; y el coordinador de campaña, Miguel Gracia, a los que se incorporarán los líderes territoriales en cada caso. Los tres comparecieron en rueda de prensa antes de la celebración de una reunión de la Ejecutiva Provincial, ampliada a la participación de los principales miembros electos.

El mensaje de cara a los pactos fue claro: que nadie se anticipe porque el proceso se ordenará de arriba hacia abajo y "en los distintos escalones: la Diputación Provincial, las comarcas y los ayuntamientos". "No somos partidarios de pactos extraños", señaló Miguel Gracia, que puedan producir "enconamientos o enfrentamientos en los municipios", porque el objetivo es, añadió, "respetar la voluntad de los electores y conformar mayorías naturales y progresistas". Esto, precisó, excluye al PP, para evitar "que se sigan aplicando políticas de recortes y políticas de sufrimiento".

El coordinador de campaña confía en que el PSOE podrá gobernar en el Ayuntamiento de Huesca con las listas progresistas de Cambiar Huesca y Aragón Sí Puede. "Hablaremos con las otras fuerzas, pero la alcaldía es irrenunciable para nosotros", dijo. Además, cree que todas las poblaciones de más de 5.000 habitantes tendrán alcaldes socialistas.

Anoche, Cambiar Huesca celebró una asamblea para preparar la negociación del Ayuntamiento de Huesca. Se nombró una comisión informadora integrada por cuatro personas para contactar y conversar con PSOE y Aragón Sí Puede en los próximos días.

Hasta la sede socialista se acercaron ayer todos los candidatos que irán a las Cortes y los alcaldables de Monzón, Binéfar, Fraga, Huesca y Jaca, ayuntamientos donde se ha producido un vuelco, de forma que volverán a tener gobiernos de la izquierda. No faltaron las felicitaciones.

Por su parte, el secretario general del PSOE de Huesca calificó los resultados de "excelentes". Recordó que han ganado las elecciones municipales en la provincia, con más de 90 mayorías absolutas y 18 mayorías relativas, y también han sido el partido más votado en las autonómicas. Y destacó que Huesca es de los pocos territorios donde el mapa se ha pintado de rojo, junto con las provincias del sur y Asturias.

El hecho de haber perdido menos de un punto en las primeras respecto a 2011 (del 36,73% al 35,42%, casi 3.800 votos), aún con la competencia de partidos emergentes, es "una demostración del arraigo" del PSOE en la provincia, según Cosculluela. Más dura ha sido la caída en las autonómicas, ya que la lista que precisamente encabeza él ha tenido 10.000 votos menos que hace cuatro años.

Los pactos, precisó, serán con fuerzas "afines en lo programático y en lo ideológico, pero sin descartar ninguna posibilidad que pueda dar mayorías y ayuden a gobernar las comarcas". El PSOE es mayoritario en ocho de las diez. "En algunas comarcas podemos gobernar con unas fuerzas y en otras, donde estas no estén, habrá que llegar a acuerdos con formaciones distintas", añadió.