"Espero que sea el inicio de nuestra mejor fase"

Popovic confía en recuperar el buen juego y la comunión con el público mañana frente al Alcorcón.

Ranko Popovic empuja una portería móvil en la Ciudad Deportiva.
Ranko Popovic empuja una portería móvil en la Ciudad Deportiva.
josé miguel marco

La victoria del pasado domingo en Santander ha rebajado notablemente la presión en el vestuario zaragocista. Rota la mala dinámica que hizo acumular cinco partidos seguidos sin ganar, el Real Zaragoza retorna mañana a La Romareda con el objetivo de voltear la tendencia, de instaurar de nuevo una racha positiva que reconduzca y agrupe de nuevo ánimos y voluntades en torno al equipo.


Ranko Popovic indicó ayer en el aspecto anímico del público como factor crucial de cara a la recta final de la temporada. "Yo espero un ambiente excelente, como el que se dio en Santander. Fue fantástico el apoyo que recibió el equipo. Esa gente cree en nosotros. El equipo necesita su ayuda y ánimos. Por supuesto, también deseo que el equipo les dé algo a ellos para permitir que puedan meterse enseguida en el partido desde la grada", indicó el entrenador serbio.

"Yo no entiendo alguien venga al campo a silbar al equipo premeditadamente. Ninguno. Todos vienen para ver un buen partido y nosotros hemos de estar a la altura para ofrecérselo", añadió.


Popovic es consciente de que, este ante el Alcorcón, es el capítulo que enlaza con aquella decepción general que se vivió en La Romareda tras el feo 0-0 que se dio hace 15 días frente al Lugo. Por eso, tiene claro que mañana están obligados a modificar su aplicación y, sobre todo, su solvencia ante la meta madrileña, tan escasa frente a los lucenses. "Estoy convencido de que nos vamos a recuperar. El equipo va a imponerse desde el principio, con ganas. Con la gente que recuperamos, va a ser posible cambiar la actitud", aseguró.


"Confío en que el equipo no caiga presa de la responsabilidad. Si no somos capaces de jugar bien por la presión, mejor que dejemos este trabajo", apostilló al respecto. Popovic admite que es el momento clave para reconducir los resultados y que no cabe demasiado margen para más errores. "Estamos recuperando la cohesión, la competitividad. Yo espero que sea el inicio de nuestra mejor fase de la temporada, porque ya estamos en la recta final de la liga", dijo.

La alineación y Willian José

El simulacro de partido que ayer organizó el técnico en la Ciudad Deportiva dejó claro que mañana jugarán Alcolea; Fernández, Mario, Cabrera, Rico; Basha, Dorca; Sergio Gil, Ruiz de Galarreta,Pedro; y Willian José. Y Popovic no dio largas esta vez. "El once titular es evidente esta vez, salvo que nos sorprenda algo inesperado en las próximas 48 horas, cosa que ya no me extrañaría", dijo con retintín, aludiendo a las lesiones de última hora de semanas recientes.


Sobre Willian José, el sustituto natural del pichichi Borja Bastón, que va a faltar por primera vez en la temporada, Popovic lanzó una advertencia a todo el entorno del equipo. "Lo peor que puede pasar ahora es que metamos presión a Willian. Que queramos que en un partido llegue a los números de Borja", avisó. "Willian va a jugar en su posición y tiene que sentirse cómodo. No preocuparse mucho de cómo le van a salir las cosas, sino tratar de disfrutar, de hacerlo bien, de hacer lo que él puede hacer. Solo así le saldrán las cosas bien al él y a nosotros", abundó.


Tampoco quiso cargar de responsabilidad a Pedro, el único goleador acreditado que saldrá de inicio mañana. "No es él quien tiene que aportar gol, es todo el equipo. Me da totalmente igual quién meta los goles. Este es un día para que todos demuestren que son un equipo. No me gusta depender de un solo jugador para nada. No son importantes las individualidades".

El Alcorcón, un rival áspero

Por último, Popovic definió el tipo de rival que aguarda. "El Alcorcón es un equipo con mucha intensidad, que muchas veces va al límite. Es muy competitivo", arrancó en su descripción. "Tienen mucha verticalidad, llegan arriba con muchos jugadores. La clave es que seamos nosotros los que marquemos el ritmo y no ellos", concluyó.