Un recorrido desde la pintura barroca a los inicios de la abstracción

La obra de artistas aragoneses como Bayeu, Pradilla, Gargallo o Saura acompaña a la de Goya para vertebrar la nueva propuesta.

La planta baja del Museo Goya Colección Ibercaja se ha reservado para las exposiciones temporales. De allí, el visitante puede bajar al sótano, donde se proyectan dos audiovisuales (uno de ellos para el público infantil) sobre la vida y la obra del pintor de Fuendetodos. También allí se pueden contemplar los restos arqueológicos de época romana descubiertos años atrás durante las obras de restauración del edificio.


El recorrido propiamente dicho se inicia en la primera planta, dedicada a los antecedentes de Goya, con un acento especial en la pintura religiosa del Barroco, con autores como Castillo, Llanos Valdés, Cano, Escalante, Carreño y Moreno. Destaca, entre otros, un ‘San Isidro, labrador’ de Jusepe Leonardo; dos cuadros de discípulos de Rembrandt; o una ‘Inmaculada Concepción’ de Berdusán que acaba de comprar Ibercaja. Se han dedicado espacios propios a temas pictóricos como el retrato o el bodegón.


La segunda planta se ha consagrado por completo al pintor de Fuendetodos. La sala Goya exhibe 38 obras, 11 de ellas de nueva incorporación y procedentes de la Económica. Al ya emblemático retrato de Félix de Azara se han sumado piezas como la ‘Caída de los gigantes’, de Francisco Bayeu, o una copia del ‘Cristo crucificado’ que realizó su discípulo, Felipe Abás. Atención especial merece también la obra de destacados pintores que influyeron en Goya, y otros pintores españoles coetáneos, como Corrado Giaquinto y Mengs.


El museo es el único del mundo que muestra permanentemente la obra gráfica completa del de Fuendetodos: 244 grabados, entre los que se encuentran ‘Los caprichos’, ‘Los desastres de la guerra’, ‘La tauromaquia’ y ‘Los disparates’. Se ha querido que el visitante tenga información detallada de cada uno de los grabados y de su significado.


La tercera planta se ocupa de presentar ‘El legado de Goya’. Se exhiben 153 obras, de las que 20 han llegado al centro procedentes de la Colección Ibercaja. Entre los artistas representados destacan Eugenio Lucas Velázquez, Eugenio Lucas Villaamil , Mariano Fortuny, Eduardo Rosales y Muñoz Degrain, que evidenciaron el influjo de Goya en sus pinturas. Hay, como es lógico, una selección del mejor paisajismo español del siglo XIX (Carlos de Haes, Beruete y Martínez Abades) y se dedica un apartado específico a las grandes figuras aragonesas:Unceta, Pradilla y Barbasán.Escultura y pintura


El recorrido se cierra con una sala que entronca con lo contemporáneo y los inicios de la abstracción. La parte central se ha dedicado a la escultura, con obras de tres grandes artistas aragoneses: Pablo Gargallo, Honorio García Condoy y Pablo Serrano; y de las paredes cuelgan pinturas de artistas contemporáneos.


También en este aspecto destaca la presencia aragonesa, tanto de los pintores que formaron parte del Grupo Pórtico –Santiago Lagunas, Fermín Aguayo y Eloy Laguardia–, como de Antonio Saura, Manuel Viola o Salvador Victoria.


"Quería presentar al público lo que han hecho los artistas aragoneses en el siglo XX –señalaba ayer Arturo Ansón–, en un recorrido que llega a nombres muy de nuestros días, como Beulas, Ruiz-anglada u Orús". El museo, así, se convierte en toda una lección de arte.