La DGA resuelve de manera interina la dirección del Museo de Zaragoza. La plaza tiene que salir a oposición

El responsable del Museo de Huesca desde agosto de 2013, Julio Ramón, sustituye en el cargo a Miguel Beltrán tras su jubilación.

Hace cuatro días, el todavía hoy director del Museo de Zaragoza, Miguel Beltrán, se despedía de un cargo que ha ejercido durante los últimos 40 años con la inauguración de una nueva sala dedicada a exposiciones temporales. Cuando faltan horas para que ponga fin a su responsabilidad (se jubila oficialmente mañana), el Departamento de Cultura del Gobierno aragonés anunció ayer que su sustituto de forma interina es Julio Ramón, quien desde agosto de 2013 está al frente del Museo de Huesca. En los próximos días, también en situación de interinidad, se tendrá que nombrar un responsable para la institución oscense.


La dirección del Museo de Zaragoza es un puesto que depende del Servicio Provincial de Investigación y Difusión del Patrimonio Cultural del Ejecutivo autonómico, cuya plaza tendrá que salir a concurso oposición. El Departamento de Comunicación de la DGA no concretó ayer si hay un plazo de tiempo para su convocatoria.


Julio Ramón (Sástago, 1972) es licenciado en Historia del Arte por la Universidad de Zaragoza en 1995 y trabajaba desde 2005 como conservador en el Museo Provincial de Huesca, del que fue nombrado director en agosto del año pasado, cuando dejó esta responsabilidad Vicente Baldellou. Julio Ramón explicó ayer que espera tomar posesión "en los próximos días", una vez pasen estas fiestas navideñas, para tomar tierra en su nuevo destino y reunirse con el equipo del centro, que en estos momentos conforman 32 profesionales.


El nuevo director del Museo de Zaragoza es doctorando con un estudio sobre ‘Arquitectura de la Orden Franciscana en Aragón en la época moderna’ y está especializado en gestión de patrimonio cultural, con un postgrado de gestión cultural y un máster en urbanismo, ambos en la Universidad de Zaragoza.


Julio Ramón ha desarrollado toda su carrera profesional en la comunidad en actividades vinculadas tanto con la difusión del patrimonio desde el punto de vista didáctico como con su protección. Así, antes de entrar como conservador en el Museo de Huesca, trabajó en actividades didácticas vinculadas a las exposiciones de La Caixa que se organizaban en la Lonja del Ayuntamiento de Zaragoza y formó parte de la plantilla de guías de la ciudad en las rutas romanas y de Goya. Además de impartir clases en postgrados de la Universidad, ha estado vinculados a proyectos de arqueología de patrimonio industrial de la provincia de Zaragoza y de inventario de los bienes de las parroquias de Barbastro y Monzón, entre otras iniciativas.

Sin proyectos ambiciosos


Julio Ramón llega a un Museo de Zaragoza cuyo proyecto estrella en años pasados, el Espacio Goya, está totalmente descartado. Por si podía cabía alguna duda de ello después de varios años paralizado, la presidenta de la Comunidad, Luisa Fernanda Rudi, le dio el carpetazo definitivo hace unos días en Madrid, con motivo de la reunión en la capital de España de la Fundación Goya en Aragón.


"Es un proyecto que el Gobierno anterior no cristalizó y que este Ejecutivo no asumió", dijo la presidenta Rudi sobre esta idea de construir un museo específico sobre el maestro de Fuendetodos en la capital aragonesa. Esta posibilidad surgió hace algo más de 15 años y ejecutivos anteriores plantearon que se ubicara en la antigua Escuela de Artes, en la Plaza de los Sitios. Rudi indicó que este proyecto "tenía un problema, y es que obra de Goya en Zaragoza hay la que hay", en referencia a que tampoco son tantos los cuadros del pintor que son propiedad de instituciones aragonesas y que además ya están todos expuestos.


En su último acto público como director del Museo de Zaragoza, Miguel Beltrán, también se lamentó de la paralización de la ampliación del edificio, un proyecto "que se quedó en el camino de la crisis". En su opinión, el futuro "pasa por reorganizar" el museo porque "son fundamentales nuevos espacios para nuevos usos, que es lo que la sociedad exige".


De momento, Julio Ramón prefiere no opinar sobre estos temas que, asegura, solo conoce "como espectador y a través de los medios de comunicación". Antes de hablar sobre necesidades y posibles actuaciones, quiere tener información de primera mano y todos los datos.