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"Por culpa del molino, tenemos ruido día y noche en casa con las persianas cerradas"

"Por culpa del molino, tenemos ruido día y noche en casa con las persianas cerradas"
"Por culpa del molino, tenemos ruido día y noche en casa con las persianas cerradas"
Mª ÁNGELES MERCADER

Javier Galán, de 32 años, se fue a vivir hace año y medio con su pareja al municipio zaragozano de Cadrete, concretamente a una zona de nueva urbanización. Al poco de asentarse, levantaron un aerogenerador en lo alto de la montaña, justo encima de las nuevas viviendas. "Nosotros llegamos al publo en junio y, de repente, amaneció el mástil y, al poco, el aerogenerador", explica Javier, quien asegura que sufre todos los días sus molestias.

 

"El molino nos mete el ruido dentro de casa día y noche, incluso con las persianas cerradas", se queja Javier. "Además de eso, está el efecto discoteca: el molino se interpone delante del sol y provoca un parpadeo constante, sobre todo se nota más en las mañanas estivales: tan pronto se hace de día como de noche. No solo nos afecta a los que vivimos en esas casas, también al colegio, que está al lado. Y el viento es mucho más fuerte cuando rebota contra las aspas", explica.

 

A eso, se añade el efecto visual. "Rompe la estética de la línea visual con los restos del castillo de Cadrete", señala Mª Ángeles Mercader, concejala de CHA en el municipio. Otras voces hablan también en esta línea, como la de Fabio Pérez, de 20 años: "Me marché de colonias y cuando vine, ahí estaba el molino. Me quedé sorprendido. Ves el castillo y, al lado, dos o tres veces mayor, el aerogenerador. Da pena. Yo no me opongo a la energía limpia, desde luego, pero tiene que haber otras opciones".

 

El aerogenerador se levantó en el verano de 2008, aunque el proceso comenzó mucho antes. En 1999, el departamento de Industria de la DGA dio la autorización administrativa para tres generadores de 250 KW de potencia y, en una segunda fase, otros dos de 750 y 1.000 como parte de un proyecto de I+D. En 2007, se modificó y se decidió levantar dos aerogeneradores de 1,25 MW. Finalmente, en 2008 se colocó uno de 1,3 MW. "Se siguieron todos los pasos y se obtuvieron todos los permisos de la Administración. Estuvo expuesto al público durante dos meses en 2000 y 2007 y nadie dijo nada. No entiendo ahora por qué tanto problema", dice la alcaldesa de Cadrete, Mª Ángeles Campillos.

4.700 euros al año de alquiler

"Además, al estar sobre suelo público, el molino genera 4.700 euros al año por alquiler, que destinamos a fines de interés social, y a medio plazo dará un 2,5% de la energía que se produzca", expone.

 

Para algunos vecinos, como Juan Jesús Gracia Utrilla, de 39 años, no es suficiente. "Si, por lo menos, el Ayuntamiento sacase algo más. No estoy en contra del molino, pero veo que da más problemas que beneficios", expone Juan Jesús. "Esto es como el río, cuando huele mal o hay riadas, son cosas que no se pueden evitar, pero, dentro de ello, si el Ayuntamiento sacase algo...", insiste.

 

Lo que más preocupa a los vecinos es el riesgo que conlleva estar tan cerca de las casas. "La energía renovable es positiva, nadie lo niega, pero tiene que haber una regulación, no todo vale. No se debería poder poner un molino tan cerca de un núcleo urbano, es peligroso", denuncia Javier. El aerogenerador está a menos de 150 metros de las nuevas viviendas, a 300 del casco antiguo y a 427 del castillo, según informó la concejalía de Urbanismo en un pleno. "Hay un vacío legal en esta materia, y eso es lo que han aprovechado empresas privadas para especular con nuestros paisajes y nuestro territorio. Es una salvajada", lamenta Javier.

Queja vecinal. Algunos vecinos se han unido en contra de la ubicación del aerogenerador, entre ellos Javier Galán (primero por la izquierda), Fabio Pérez (a su lado) y Juan Jesús Gracia (de jersey claro).