Es uno de los imprescindibles a la hora de preparar el equipaje y nuestro destino para las vacaciones de verano; nos referimos al botiquín de primeros auxilios con su material básico, aunque tampoco debería faltar en el hogar, en el coche, en el trabajo, en el aula... Tenerlo en buenas condiciones, nos ayudará a afrontar determinadas situaciones, sin pérdida de tiempo. Podemos elegir una bolsa o maletín, en el mercado encontraremos botiquines con y sin contenido, que son ligeros y fáciles de transportar. No hace falta que sea demasiado voluminoso, ya que el material que nos recomiendan Pedro Orós, pediatra, y Joaquín Martínez, enfermero y experto en prevención, no requiere de mucho espacio. Pero, ¿qué tipo de productos no deberían faltar nunca en nuestro botiquín?

No nos puede faltar...

Guantes: vitales. Son nuestra protección ante la sangre y otros fluidos. Tijera de ‘pico de pato’: necesaria para cuando hay que cortar ropa rápidamente ante una hemorragia, fracturas… Al tener la punta roma no existe riesgo de poderla clavar. Pinzas: para coger el material y como ayuda en la limpieza de las heridas. Agua oxigenada o suero fisiológico: cualquiera de los dos productos sirven para limpiar las heridas. Yodo o povidona yodada (betadine): para la desinfección de las heridas. Gasas: para la limpieza y la aplicación de desinfectantes. Nos servirán también para el taponamiento en el sangrado de nariz -si es necesario- y de pequeñas heridas. Compresas: vienen muy bien para taponar hemorragias importantes. Vendas elásticas: para un vendaje compresivo ante hemorragias serias. Apósitos adhesivos: se utilizan para cubrir las heridas y evitar infecciones. Esparadrapo: para sujetar bien los vendajes. Manta térmica: ideal para mantener al herido en las mejores condiciones de temperatura, tanto en verano como en invierno. Bolsa de frío: proporciona frío instantáneo para aplicar en golpes, contusiones, esguinces, fracturas, sangrado de nariz, picaduras… Estas bolsas producen frío cuando se actúa sobre ellas -dando un golpe y agitándolas-. Aunque, es mejor leer las instrucciones antes de hacerlo.¿De qué podemos prescindir?

Algodón: los hilos y fibras se quedan pegados a la herida y pueden ser foco de infecciones. Alcohol: es muy agresivo para los tejidos, por eso escuece tanto. Solo debe utilizarse cuando la piel está intacta -inyectables, extracciones de sangre...-.Y recuerda, es muy importante:

Llevar en el botiquín aquello que sepamos utilizar. Guardarlo en un lugar accesible, alejado de las fuentes de calor. Si hay medicamentos, que estos sean únicamente para uso personal. No debemos administrar medicamentos a nadie; solo puede hacerlo un médico. Reponer lo que hayamos utilizado. El botiquín del coche hay que revisarlo más a menudo, ya que las altas temperaturas, en verano, pueden deteriorar algún material o producto.