El actor Jorge Sanz vivió ayer una intensa tarde de cine en Zaragoza. Asistió al estreno en pantalla grande de la última entrega de la serie ´Qué fue de Jorge Sanz`, de David Trueba; participó en el coloquio posterior y terminó la jornada en el Contenedor Creativo presentando el libro ´Jorge Sanz, un actor superdotado`, coordinado por el periodista Mariano Gistaín.

En el cine del colegio La Salle-Gran Vía estuvo arropado por Sergio Casado, impulsor del ciclo ´Otro modo de ver el cine`; Jacobo Henar, director del centro, y Mariano Gistaín. Y de testigos, alrededor de un centenar de espectadores. El auto sarcasmo y la capacidad del protagonista de reírse de sí mismo convencieron al público, que entendió que este proyecto no habría sido ni la mitad de bueno con otro actor.

A la pregunta de qué ha sido de Jorge Sanz en estos cinco años desde que se estrenaron los capítulos anteriores, el aludido dijo que ha llevado una vida tranquila, ha tenido otro hijo, ha sufrido un infarto y ha peleado por seguir trabajando. “En este oficio vivimos de las coletillas que te ponen; tan pronto eres imprescindible como de repente no apareces en ningún sitio”.

Durante la velada estuvo muy locuaz, una condición que Mariano Gistaín cree que se ha acentuado tras el infarto que tuvo. Él le dio la réplica asegurando que “al final ha sido muy saludable; ha servido para poner orden en la vida disipada que llevaba desde los 16 años”.

Caminando, en apenas diez minutos, el actor llegó con sus acompañantes al Contenedor Creativo. Allí se sumaron a la presentación Chechu León y Diego Pérez, del festival de cine Octubre Corto de Arnedo, que ha editado el libro, y José Mari Gómez ´Cuchi`. En las intervenciones se recordó que ´Jorge Sanz, un actor superdotado` nació en el mismo acto de entrega del premio Rafael Azcona que el actor recibió el año pasado.

Todo lo que allí pasó lo transformó Mariano Gistaín en una gran obra de teatro que repasa su trayectoria. Se recuerda, por ejemplo, que fue un encuentro fortuito con la actriz Amalia de la Torre, durante el casting de la película ´La miel`, de Pedro Masó, el que le llevó a firmar su primer contrato siendo muy pequeño.

En la presentación recordó que lleva trabajando 38 años. “En este tiempo he pasado de ser el niño de los rodajes al abuelo; soy el actor vivo que más veces ha trabajado con Azcona y con actores como Fernán Gómez; me hacen homenajes como el de Arnedo, así que me estoy empezando a preocupar”, confesó.

En el libro también se rememora cómo en ´Conan el Bárbaro`, interpretando al protagonista de niño, se dio cuenta de que si quería ser actor tenía que aprender a llorar; se repasan las decenas de películas que ha hecho y el paso de la fama al olvido. Lo que no refleja es su última gran aparición mediática: la foto de portada en ´Hola` junto a la reina Letizia. “Matas a siete menores y la gente se entera menos que si sales en esa revista, pero a mí donde me gustaría aparecer es en la portada de algún libro de Antón Castro”, concluyó.