La exsecretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton, asegura que ha "pasado página" en el escándalo de Mónica Lewinsky, que azotó el segundo mandato de su esposo, Bill Clinton, y apuntó que en los próximos meses decidirá si se presenta a la candidatura presidencial demócrata para 2016.

"Creo que todo el mundo debe mirar al futuro. He pasado página", afirmó Clinton, de 66 años, en una entrevista en la revista People, divulgada este miércoles, en la que comenta su vida lejos de la actividad pública desde que dejase de encabezar la diplomacia de Estados Unidos en 2013.

El escándalo Lewinsky, ocurrido en la década de 1990, volvió a acaparar la atención mediática en Estados Unidos hace unas semanas, cuando la antigua becaria de la Casa Blanca, con quien Bill Clinton tuvo una relación extramarital, rompía su silencio de más de una década y publicaba un artículo en la revista 'Vanity Fair' en el que mostraba su arrepentimiento por lo sucedido.

Por otro lado, Hillary Clinton no eludió comentar su más que posible candidatura presidencial en 2016.

"Sé que tengo que tomar una decisión", reconoció al respecto.

No obstante, indicó que este tiempo lo había dedicado a descansar y recuperar el "sueño" perdido tras los agotadores años al frente del Departamento de Estado.

Además, subrayó, con "la alegría añadida" de saber que va a convertirse en abuela, ya que su hija Chelsea anunció hace unos meses su embarazo.

"Quiero vivir el momento. Pero al mismo tiempo estoy preocupada sobre lo que veo que ocurre en el país y en el mundo. En los próximos meses pensaré más sobre el papel que puedo, o creo, que debería desempeñar", adelantó.

Entre sus placeres cotidianos, Clinton destaca la limpieza de los armarios, las sesiones de yoga y gimnasia acuática, y su adicción a la serie de televisión 'House of Cards', un thriller político centrado en las relaciones de poder en Washington.

La entrevista en 'People' se publica una semana antes de que salga a la luz su libro de memorias 'Decisiones difíciles', en el que comenta sus años como jefa de la diplomacia estadounidense.