La pasión por la Semana Santa en el Bajo Aragón estalla en un estruendo en siete de los nueve pueblos de la Ruta del Tambor y Bombo. El Bajo Aragón histórico, con excepción de Calanda, Rompe la Hora cuando los relojes marcan la medianoche del Jueves Santo. Miles de personas se emocionan y vibran con un estruendo de la anoche que los bajoaragoneses esperan con ilusión de año en año. 

Fue el cineasta Luis Buñuel, natural de Calanda, quien un Viernes Santo tocó el tambor en París y dio a conocer al mundo esta tradición que cada año concentra en los pueblos del Bajo Aragón a miles de tocadores de bombos y tambores y a decenas de miles de turistas.

Los primeros en romper la hora lo hacen a las doce en punto de la noche en las plazas de Híjar, Alcorisa, Urrea de Gaén, La Puebla de Híjar, Samper de Calanda, Andorra y Albalate del Arzobispo. Algunos, rompen la rora sobre auténtias obras de arte. Después los tocadores se dispersan en cuadrillas y no dejarán de tocar hasta que concluyen las procesiones de la tarde del Viernes Santo.

En Calanda, sin embargo, la hora se rompe a las doce del mediodía del Viernes Santo. Miles de calandinos con sayas moradas aguardan a esta hora a que el alcalde y sus invitados den la señal golpeando un gran bombo construido en 1973.

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