Una realidad

El cineasta oscense Carlos Saura.
El cineasta oscense Carlos Saura.
Efe

Parece que todo queda suspendido en agosto. Pero no es así. Problemas y dudas se remueven cuando les da la gana. Le doy vueltas a la cabeza. No consigo vislumbrar el camino para salir de mis propios atolladeros. Me asomo al Ebro. Hace demasiado calor para pasear y para pensar. Entro en la Lonja. Las fotografías de Carlos Saura son magníficas. Me gustan, sobre todo, aquellas en las que sale su hermano Antonio. Los pies de Antonio, junto a la punta del bastón con el que caminaba, están cargados de cariño. Salgo reconfortada de la Lonja. Continúo caminando con mis dudas hasta una administración de lotería cerrada por vacaciones, como todo. Llevo en el bolso un libro de Milan Kundera que rescaté tras leer un artículo que Javier Cercas le dedicaba hace unos días. Lo considera uno de los novelistas fundamentales de la segunda mitad del siglo XX, y citándolo dice que "la novela descubre lo que está oculto en cada uno de nosotros". Yo busco una seguridad que perdí hace tiempo. Y si no está oculta dentro de mí, al menos necesito una guía que me lleve allí donde esté. En mi juventud solía usar la baraja española para aclarar mis ideas. Las cartas decían lo que yo quería oír. Como la cartomancia ya no me sirve, recurro a la bibliomancia, que consiste en abrir un libro al azar e interpretar alguna frase adaptada al contexto. Abro al azar ‘El telón’ de Kundera: "Cuanto más se observa atenta, obstinadamente, una realidad, más se entiende que no responda a la idea que todo el mundo se hace de ella". Sigo sin entender ninguna realidad, pero me fijaré en qué dirección apuntaba el bastón de Antonio Saura.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión