La temporada de la Sociedad Filarmónica vuelve los ojos a la música de cámara

La Sociedad Filarmónica de Zaragoza acostumbra a sorprender cada temporada. Si el año pasado la apuesta clara fue por la música vocal, grandes producciones incluidas (‘Un réquiem alemán’ de Brahms, ‘La Pasión según san Juan’ de Bach...) este año la programación vuelve a centrarse en lo que ha sido la esencia de la entidad en sus 117 años de historia: la música de cámara. "Los tiempos no son más fáciles por el hecho de que ya no tengamos el lastre de la pandemia –señala la presidenta de la entidad, Cristina Sobrino–. Siempre hay que buscar un punto de ilusión en el diseño de la programación que ofrecemos en cada nueva temporada porque es también lo que busca el socio, ilusionarse. Y también pensamos en agradar a la mayor cantidad posible de socios. En los próximos meses creo que por Zaragoza va a pasar la mejor música de cámara del panorama internacional".

La nueva temporada de la Filarmónica, que cuenta con el apoyo de Fundación Ibercaja, se iniciará el 22 de octubre con el grupo Chiavette, cuarteto vocal aragonés que, ampliando su formación, ofrecerá sus ‘Exquisitas ensaladas’, con obras de Mateo Flecha el Joven y Sebastián Aguilera de Heredia, entre otros. Y concluirá el 8 de junio del año próximo con un concierto de la Orquesta Sinfónica Universitaria de Zaragoza.

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El Trío Guarneri de Praga

Entre ambas citas, otros diez conciertos de altura. "Hemos conseguido incluir en la temporada, por ejemplo, el Trío Guarneri de Praga, una de las mejores formaciones del mundo, que cumple 33 años y que, paradójicamente, no había actuado hasta ahora en Zaragoza –relata Cristina Sobrino–. Viene también el Quinteto de la Filarmónica de Berlín, en la que será la tercera actuación de su historia en la capital de Ebro. O el Cuarteto Quiroga, que en muy poco tiempo se ha hecho un hueco entre las mejores formaciones de Europa y que se reinventa en cada concierto". Esta formación acaba de cumplir 20 años y, para celebrarlo, ha publicado un nuevo disco, ‘Átomos’. También se incluyen conciertos que quieren ser una ventana a lo más novedoso del panorama nacional, y ahí es donde se enmarca la actuación de la gallega Isabel Dobarro, quizá la pianista española de mayor proyección internacional en estos momentos.

Pero, como viene siendo ya habitual, la temporada presenta también algunas sorpresas. "Volvemos a ser relevantes en los pequeños conciertos, en las propuestas menos habituales, en buscar conexiones entre la música clásica y otros estilos, como el jazz, el flamenco o la música sefardí –añade Sobrino–. Ahora, por ejemplo, proponemos un dúo clásico, como el Cassadó, pero en una propuesta distinta, porque viene junto al bailaor flamenco Iván Vargas para rendir homenaje a Lorca. O proponemos a Pilar Almalé, que viene a interpretar música sefardí, renacentista y barroca. O The New Bach Trio, que va a interpretar música de Bach pero con Claudio Constantini al bandoneón. Y también la clarinetista Pilar Ochoa, que va a hacer una fusión de flamenco y jazz con un guitarrista flamenco y un percusionista". 

Todos los conciertos se celebrarán en el Auditorio de Zaragoza, y se mantienen los horarios del año pasado: de lunes a viernes comenzarán a las 19.30; en sábado y domingo, a las 18.30. También se mantiene El Sillón Rojo, ciclo de charlas a cargo del crítico Juan Carlos Galtier. "Gracias a los socios, al Auditorio de Zaragoza y a la Universidad San Jorge la temporada de la Filarmónica sigue siendo atractiva", concluye Sobrino.

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