El fotógrafo Jesús Macipe revela sus dos ‘caras’ en el cierre del curso de la UNED
El bilbilitano separa en su exposición de Calatayud el trabajo periodístico (colabora en HERALDO) de la fotografía de autor
El fotógrafo Jesús Macipe (Calatayud, 1961), colaborador gráfico de HERALDO desde hace más de 15 años en la comarca bilbilitana y sus alrededores, protagoniza el cierre del curso expositivo 2022-2023 del centro asociado de la UNED en esta ciudad. Lo hace con una selección de 20 instantáneas, en las que refleja sus dos facetas: el costumbrismo documental y la fotografía de autor. Esta muestra se halla en la sala de exposiciones de la sede universitaria, y puede visitarse de 9.00 a 13.30. Se inaugura este lunes 26 de junio a las 13.00.
En su primer campo de trabajo, Macipe se sirve de material recopilado durante más de una década, con coberturas de todo tipo: deportivas, políticas, económicas, culturales, sucesos y festivas, entre otras. "Es una fotografía muy humanista. Lejos de ser fotógrafo de lo exótico, lo soy de lo que tengo en la puerta de casa, que es mi ciudad, mi comarca".
Aun siendo citas recurrentes o muy conocidas en algunos casos, el autor busca "salirse de los tópicos". "Una regla de la academia dice que una vez que se conocen, hay que salirse de ellos". Para él es fácil hacerlo "tanto si sabes en qué consisten, como si son desconocidos". Uno de estos últimos fue la reciente Saca de la Virgen de Bijuesca. "Se convierte en un reto".
En lo que ha encuadrado como fotografía de autor, Macipe se muestra sin las ataduras impuestas por el rigor informativo. "Ahí soy más independiente, más libre, más creativo. No busco que la gente lo entienda sino provocar, que el público sea el que tenga que entenderme". Aquí hay actos multitudinarios, como el chupinazo de San Roque, hasta espacios reducidos y privados, como habitaciones inquietantes.
No se trata de una recopilación profesional ni personal, aunque la selección ha sido "muy compleja". "Son muy pocas en comparación con el fondo que acumulo, pero hay un nexo entre los dos campos". Aunque la colaboración con HERALDO la inició a principios de los 2000, Macipe hunde su relación con la fotografía hasta los 9 años. "La primera cámara que toco es una de baquelita que hallamos mi hermano y yo paseando por las escombreras del barranco de la Bartolina", apunta.
Desde la primera película que usó, de la que solo salió la mitad, Macipe empezó a tejer un fuerte vínculo con el arte de inmortalizar. "Con 18 años ya acudí a la Contradanza de Cetina y de ahí en adelante, a seguir;la fotografía es algo que te va atrapando. Lo que buscas es transmitir las sensaciones que te produce un paisaje, una tradición", argumenta.
Macipe asume un estilo propio, a la vez que reconoce importantes influencias. "José Verón y Carlos Moncín fueron dos buenos amigos y compañeros. Como Manuel Micheto. Todos me han enriquecido", concluye.
