cine
Carlos Saura, una reivindicación que no cesa: también llega a Brasil
Los homenajes al cineasta oscense se suceden. Un ciclo en la ciudad brasileña de Fortaleza se suma a Estados Unidos, la India, Francia, Argentina, Polonia...
A menudo, el fallecimiento de un artista ayuda a calibrar todavía con más precisión el alcance de su obra. La cercanía y la cotidianidad suelen diluir los elogios hacia su legado. Y es con su muerte cuando la realidad cae por su propio peso, sin intermediarios ni artificios.
Desde su partida el pasado 10 de febrero, la figura de Carlos Saura ha despertado una ola de homenajes y reconocimientos que, lejos de quedar recluidos al territorio nacional, se ha abierto camino en varios continentes. El Festival de Cannes proyectó su película 'Carmen' dentro de su ciclo 'Le Cinéma de la plage', un acto al que acudieron sus hijos Antonio y Anna. La pasada semana uno de los cines más emblemáticos de Washington DC, el AFI Silver Theatre, exhibió su último proyecto, el documental 'Las paredes hablan', que repetirá esta semana en el Festival de Cine de Cracovia (Polonia), que se desarrolla hasta el 18 de junio.
En abril, otro prestigioso e histórico cine de París, Le Champo, le dedicó una programación especial y específica con once de sus largometrajes: 'La caza', 'Peppermint Frappé', 'Stress, es tres, tres', 'La madriguera', 'El jardín de las delicias', 'Ana y los lobos', 'La prima Angélica', 'Cría cuervos' , 'Elisa, vida mía', 'Mamá cumple 100 años' y 'Deprisa, deprisa'. En Nueva Delhi (la India), en marzo se desarrolló un ciclo auspiciado por el Instituto Cervantes con cinco títulos, 'Cría cuervo', Elisa, vida mía', 'Mamá cumple 100 años', 'Flamenco, flamenco', '¡Ay, Carmela!' e 'Iberia'. Y en Buenos Aires el Congreso de Argentina también le consagró recientemente un ciclo.
Brasil se sube a esta ola con la organización desde este martes y hasta el 24 de junio de un programa centrado en reivindicar a Saura. Once proyecciones, una por día, se desarrollarán en el cine-teatro San Luis de Fortaleza, una ciudad de casi 3 millones de habitantes en el noreste del país. Esta sala, inaugurada en 1958, conserva su estética original y es la 'casa' de los cinéfilos de esta urbe. Del creador aragonés rescata 'La prima Angélica' (dos sesiones), 'Peppermint Frappé' (tres sesiones), 'Ana y los lobos' (dos sesiones), 'Deprisa, deprisa' (una sesión) y 'Cría cuervos' (dos sesiones).
La familia del cineasta está recibiendo con mucha emoción todo el respeto y cariño que se le transmite con todos estos guiños, a los que hay que añadir los que se dispensan en España, el último de ellos el pasado fin de semana en el Festival de Cine de Huesca. "Es maravilloso comprobar la admiración que sigue concitando mi padre. Tratamos de colaborar con todas las iniciativas que nos lo solicitan. Para nosotros es muy importante que desde tantos países sigan acordándose y resaltando su talento", concluye Anna Saura.
