Pilo Gallizo muestra el poder terapéutico de la fotografía
La fotógrafa Pilo Gallizo sufrió una importante pérdida de visión hace unos años como consecuencia de un tumor que le afectó al nervio óptico. Una situación complicada para cualquiera, pero especialmente difícil para alguien que ama la fotografía. Sin embargo, su capacidad de adaptación ha sido impresionante, hasta el punto de que los periodos de convalecencia y la importante pérdida de visión han sido para ella un acicate.
De esa motivación nació el proyecto ´Retratos sobre fondo negro`, 40 imágenes que hablan de su afán de superación y que visualizan los problemas que sufren las personas con alguna discapacidad visual. Son la expresión más clara del carácter terapéutico de la fotografía.
La exposición se inauguró ayer en el Torreón Fortea. Momentos antes, el Museo Pablo Gargallo acogió un acto de sensibilización en el que participaron la física Noemí Elia; Lourdes Díaz, presidenta de la Asociación Tiresias Galicia; José María Casado, presidente de Acción Visión España, y Pilo Gallizo.
La autora explicó que durante un año de convalecencia transformó su casa en un estudio por el que pasaron casi todas las visitas. Pilo confesó que guardó las imágenes en el ordenador, pero llegó un momento en que pensé que era un trabajo que había que mostrar. Y tanto matizó el consejero de Cultura, Fernando Rivarés, además de que fotográficamente es un proyecto muy interesante, socialmente es transformador.
A la cita acudieron muchos protagonistas de los retratos, así que para su autora la responsabilidad fue grande. Solo espero haber cumplido con sus expectativas, dijo. En la sala, además, aguardaba una sorpresa: la cantante Ludmila Mercerón al piano con un amplio repertorio musical. La muestra se podrá ver hasta el 30 de abril.
