El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha dicho hoy que no ha podido ver las películas españolas nominadas a los próximos premios Goya. "Para mi desgracia -ha señalado- no voy al cine. Leo novelas".

Rajoy, en una entrevista en Onda Cero, ha sido preguntado por sus películas preferidas de entre las que se disputarán los premios del cine español.

Ha respondido que no las ha podido ver, y al plantearle que eso puede alimentar el argumento de la gente del sector de que tiene poca sensibilidad ante el cine español, ha respondido: "Tampoco lo dicen; lo dicen algunos".

Sí ha admitido que el cine se trata de uno de los asuntos que, como otros muchos, están pendientes para el futuro.

Rajoy ha comentado que acaba de leer el libro de Fernando Aramburu 'Patria', que ha dicho que es "imprescindible" para quien quiera conocer lo que ha sucedido en el País Vasco en los últimos treinta años.

Ahora está leyendo 'Cuando estábamos vivos', de Mercedes de Vega, y que se desarrolla en Madrid al principio de la Guerra Civil.

Respuesta desde el sector del cine

Por su parte, el director de cine J.A. Bayona, uno de los favoritos de cara a la próxima edición de los Premios Goya con 'Un monstruo viene a verme', ha reprochado al presidente su "falta de interés" en el cine español.

"Un presidente que no ve el cine que se hace en su país no es por falta de tiempo sino de interés. Un desprecio impensable en otros países", ha asegurado Bayona en un tuit.

Con una recaudación de 26 millones de euros y 4,5 millones de espectadores, 'Un monstruo viene a verme' fue la película más taquillera el año pasado en España, por encima de cualquier superproducción de Hollywood, y acumula 12 nominaciones para los Goya.

Otras de las favoritas, como 'El hombre de las mil caras' de Alberto Rodríguez, sobre el exespía Francisco Paesa o 'Tarde para la ira', el aclamado debut de Raúl Arévalo, con once nominaciones cada una, están disponibles ya en plataformas "online".

En 2016 el cine español continuó su idilio con el público con una recaudación de más de 109 millones de euros y 18,14 millones de espectadores. La cuota de pantalla fue del 18,1 %, el cuarto mejor dato histórico.