Las pruebas que acorralan al ministro del Interior

La versión de Marlaska sobre lo sucedido el 24 de junio en la frontera con Marruecos ya no se sostiene tras la revelación de los últimos vídeos.

El ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska
El ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska
EP

Los nuevos vídeos de las fuerzas de seguridad marroquíes, las propias grabaciones de los drones y cámaras de la Guardia Civil y las imágenes de los diputados de la Comisión de Interior en el lugar exacto de la tragedia de la valla de Melilla del pasado 24 de junio, donde entre 23 y 72 inmigrantes -según las diferentes fuentes- perdieron la vida, están poniendo en serios aprietos al Ministerio del Interior. La versión de Fernando Grande-Marlaska de que todo ocurrió en territorio marroquí y de que las deportaciones de inmigrantes se produjeron de manera legal ya no se sostiene.

Actuación de las fuerzas de seguridad

"La Gendarmería marroquí se ha empeñado a fondo en tratar de evitar este asalto violento, bien organizado, bien perpetrado y bien resuelto por parte de los dos cuerpos de seguridad". La frase de Pedro Sánchez horas después de la tragedia le perseguirá siempre. Interior durante varios días también defendió a las fuerzas del país vecino y alabó su actuación. Sin embargo, los vídeos grabados por las ONG y por miembros de las fuerzas marroquíes muestran palizas y agresiones a los inmigrantes agonizantes por parte de los uniformados de Marruecos. Las imágenes visionadas por los miembros de la comisión de Interior reflejan que desde la parte española no se hizo nada por tratar de socorrer a los malheridos.

Material antidisturbios

En julio de 2018, al poco de llegar al cargo, Marlaska anunció la prohibición del uso de material antidisturbios en las vallas de Ceuta y Melilla. Interior nunca llegó a desmentir su uso el 24 de junio; sin embargo, lo ocultó hasta que el 4 de julio el diputado de Bildu Jon Iñairritu se desplazó a la valla y recogió vainas rojas de fogueo de las usadas para disparar botes y pelotas de gomas. Entonces portavoces de Interior admitieron que la Guardia Civil "actuó con criterios de proporcionalidad, tanto en el plano operativo como en el del material utilizado". Este lunes, la Comandancia de la Guardia Civil de Melilla desveló la verdadera envergadura del material usado aquel día: 86 botes lacrimógenos, 28 botes de gas, 65 pelotas de goma, 41 aerosoles lacrimógenos grandes y doce de otro tipo, amén de realizar 270 salvas.

Territorio nacional

"Los hechos suceden en territorio nacional de un país soberano (Marruecos) y de manera muy tangencial tiene lugar en España". "No hay dudas de la territorialidad marroquí", afirmó tajante en el Pleno del Congreso Grande-Marlaska el pasado 21 de septiembre. El vídeo publicado este martes por este periódico donde se produjo el mortal cuello de botella en el que fallecieron la mayoría de inmigrantes no dejan lugar a duda de que ese patio del puesto fronterizo de Barrio Chino estaba y está bajo control y soberanía española. De hecho, los diputados se movieron sin ningún problema por esa plazoleta, sin necesidad de autorización alguna de las autoridades marroquíes. Las afirmaciones de Marlaska también contrastan con los documentos oficiales de la Dirección General del Catastro (DGC) y el Instituto Geográfico Nacional (IGN), que sitúan sin género de dudas ese patio en España.

Agentes marroquíes en España

Por activa y por pasiva, Marlaska, también en sede parlamentaria, ha negado que agentes marroquíes entraran en España durante el asalto masivo. Esta afirmación ya fue desmontada casi de inmediato por las imágenes que tomó ese día el fotoperiodista Javier Bernardo y en la que se veían nítidamente a agentes con la leyenda en la espalda de la Gendarmerie Royale, cooperando para la deportación exprés de inmigrantes. El vídeo distribuido el martes por este periódico muestra nítidamente cómo agentes marroquíes, además, se movieron y grabaron imágenes con total libertad por el patio del paso de Barrio Chino que visitaron los diputados.

Expulsiones en caliente

Interior y su ministro han mantenido que no se produjeron 'devoluciones en caliente' tras el asalto masivo. Solo hubo "rechazos en frontera" con todas las garantías. Según el Gobierno, únicamente se computaron 101 deportaciones usando esa fórmula. El Defensor del Pueblo, sin embargo, en su informe preliminar aseguró que fueron expulsados de manera exprés al menos 470 subsaharianos. El lunes la comandancia reconoció a los diputados que se hicieron más de 400 deportaciones en aquellas, aunque insistiendo en las garantías legales.

Deportaciones de cadáveres

La BBC en su documental sobre la tragedia apunta, en base a sus propios análisis de imágenes, a que agentes marroquíes arrastraron cadáveres desde terreno español de vuelta a suelo marroquí. En los vídeos en poder de este periódico se aprecian decenas de cuerpos inertes en el patio de Barrio Chino de soberanía español que visitaron los diputados. Este lunes el titular de Interior insistió: "No hubo ningún muerto en territorio español", por lo que no hubo deportaciones de cadáveres al otro lado de la frontera tal y como apunta la cadena británica.

Medios suficientes

El Ministerio del Interior ha venido negando desde el día de la tragedia la falta de efectivos suficientes de la Guardia Civil para enfrentarse a asaltos de la envergadura del 24-J. El lunes, la Comandancia de Melilla reconoció a los diputados la situación crítica de la plantilla. En el momento de la avalancha solo había diez uniformados para intentar frenar a una muchedumbre de más cerca de 2.000 personas. El despliegue final llegó a 80 miembros de la Guardia Civil y otros 40 efectivos de otros cuerpos de Melilla.

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