Las bases de Podemos e IU tienen la última palabra sobre el preacuerdo electoral al que llegaron ambas formaciones el lunes al concluir esta medianoche una consulta de dos días sobre un pacto en el que todavía queda por cerrar, entre otras cosas, el nombre con el que se presentará la coalición.

A dos días de que expire el plazo para registrar en el Ministerio del Interior las coaliciones electorales que concurrirán a la cita del 26 de junio, los militantes de Podemos (413.585 registrados) y de IU (22.321 afiliados más 49.720 simpatizantes) votan si apoyan o no la coalición y los resultados no se harán públicos hasta este jueves.

Se trata de la primera consulta que hace Podemos a su militancia (a las siete de la tarde habían votado más de 130.000) sobre una alianza electoral que Pablo Iglesias rechazó para las elecciones de diciembre al considerar entonces que IU era un lastre.

Para IU -que no ha ofrecido datos de participación- es la segunda votación en menos de una semana, después de que la anterior se planteara con una pregunta muy genérica y cuando aún no se conocían las condiciones del preacuerdo.El nombre sin acordar

Y mientras las bases votan, los equipos negociadores de ambos partidos han continuado con los contactos para avanzar en los temas que aún están pendientes, sobre todo el nombre con el que se presentarán a las elecciones y que, según aseguran fuentes de Podemos, incluirá por descontado el nombre de su formación.

Otra posibilidad que se baraja es Unidos Sí Se Puede, que contentaría más a Izquierda Unida, aunque ya parece que se dan por satisfechos con que las siglas de IU aparezcan en la papeleta.

También han continuado las críticas desde algunos frentes de IU a la coalición, entre ellas las de Izquierda Abierta, de Gaspar Llamazares, que lamenta que no sea una confluencia "real" de las izquierdas sino un pacto "cupular" que no contempla la pluralidad.

Aparte, ven "injusto" que Alberto Garzón vaya de número cinco en la lista por Madrid.

Críticas también desde algunos dirigentes territoriales, entre ellos el coordinador en Canarias, Ramón Trujillo, quien cree que el acuerdo no es "demasiado bueno" para IU, aunque si es "magnífico" para que España pueda recuperar calidad de vida.

Igualmente ha lamentado que Garzón, siendo uno de los políticos mejor valorados, haya sido desplazado hasta el quinto lugar de la candidatura madrileña.

A todos estos reproches planteados desde algunos sectores de IU, el secretario político de Podemos, Íñigo Errejón, ha replicado que a la política "no se viene a tener un escaño asegurado" sino a pelear por "la mayoría nueva" que se quiere articular: "si somos capaces de hacer eso, se van a multiplicar los escaños", ha subrayado.

Además, ha recordado que Podemos dejó claro desde el principio que se iba a presentar con las mismas listas el 26J, aunque las "trufarían" con Izquierda Unida en aquellas provincias que se acordaran.

Una vez sellado el programa electoral de mínimos con 50 propuestas, la cesión de trece escaños "de salida" a IU y decidido que las campañas serán por separado, ya solo queda consensuar el nombre de la confluencia y el papel que tendrá IU en el futuro grupo parlamentario, otro tema espinoso que se pospone para más adelante.

Al margen de las negociaciones conjuntas, cada formación, por separado, está también trabajando en su propia estrategia electoral y así Podemos, en un movimiento táctico para asegurar el escaño del exjefe del Estado Mayor de la Defensa (Jemad) José Julio Rodríguez, que no salió el 20D como número dos por Zaragoza, le ha situado hoy como cabeza de lista por Almería.