Los detenidos en Ceuta son dos parejas de hermanos dispuestos a atentar e inmolarse

Están "fuertemente radicalizados" y estaban dispuestos a cometer un atentado, según el ministro.

Los cuatro presuntos yihadistas detenidos esta madrugada en Ceuta son dos parejas de hermanos "fuertemente radicalizados", muy adiestrados y que estaban dispuestos a cometer un atentado e incluso inmolarse, según ha señalado este sábado el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz.


Fernández Díaz ha señalado que, según la información que le ha facilitado la Policía, la célula desarticulada guarda "gran paralelismo" con los terroristas que recientemente atentaron en París contra la revista Charlie Hebdo.


La Policía ha deducido de sus investigaciones que los detenidos, de nacionalidad española y origen marroquí, tenían la "fuerte determinación de atentar" y si hubiese sido necesario inmolarse, y tenían una fuerte "preparación psicológica, además de física y del manejo de las armas", ha dicho el ministro en declaraciones a los periodistas en el recinto donde se celebra la convención del PP. 


Junto con las detenciones se han producido dos registros, en los que se han encontrado uniformes de combate, capuchas, armas blancas, algún arma corta. La operación, ha recordado el ministro, está dirigida por el juzgado central número cinco de la Audiencia Nacional; coordinada por la Fiscalía, y desarrollada por la comisaría general de información del cuerpo nacional de policía.

Jorge Fernández Díaz ha insistido en la "fuerte determinación" que los detenidos tenían para cometer un atentado y su "destreza" para llevarlo a cabo.


Y ha subrayado por ello que la operación llevada a cabo ha sido "muy importante" y pone de manifiesto que cuando el 7 de enero se activó el nivel tres de alerta antiterrorista se hizo sabiendo cuáles eran las "amenazas" para España y para el resto de la UE y de la comunidad occidental.


"No tenemos mayor ni específico nivel de riesgo adicional" con respecto al resto de países pero "evidentemente no estamos fuera de esa amenaza", ha dicho el titular de Interior.


Ha recordado que ya el año pasado se llevaron a cabo numerosas operaciones, se desmantelaron doce redes yihadistas con decenas de terroristas detenidos y puestos a disposición judicial, y en esa misma línea se enmarca la operación de hoy.Más detalles de la operación


El Ministerio del Interior ha informado en un comunicado de que en el transcurso de la operación Chacal -desarrollada esta madrugada por agentes de la Comisaría General de Información- se han practicado dos registros domiciliarios, donde los agentes se han incautado de una pistola del calibre 9 mm parabelum, uniformes de combate y pasamontañas.


También se han localizado placas de matrícula de vehículos españoles, machetes de grandes dimensiones, otro tipo de armas blancas, así como armas cortas, material informático y diversa documentación.


Interior subraya que los cuatro detenidos formaban parte activa de una célula y actuaban siguiendo las consignas del líder de la organización terrorista yihadista Daesh -conocido como Estado Islámico-, Abu Bker Al Baghdadi, a través de una potente y agresiva campaña de comunicación y difusión mediática en los foros y páginas yihadistas de internet.


Unas consignas que se centran tanto en la necesidad de reclutar y enviar nuevos combatientes a la zona de conflicto (Siria-Irak), como en la idoneidad de cometer actos terroristas de amplia repercusión mediática en cualquier país occidental, y más concretamente europeo, en apoyo a Daesh.


Ante estos hechos, la Policía decidió "neutralizar" la amenaza potencial que constituían para España los integrantes de la célula desmantelada, habida cuenta de la situación actual de riesgo y de los paralelismos detectados con los autores de los atentados de Francia.


Además del perfil similar al de los hermanos Kouachi que atacaron el semanario satírico francés, los servicios de información españoles de la Policía han constatado otros elementos coincidientes con los detenidos en Ceuta.


Todos, deja claro Interior, estaban entrenados física y mentalmente para llevar a cabo la "Yihad", habían adoptado numerosas y complicadas medidas de seguridad en sus desplazamientos y comunicaciones, tenían acceso a la adquisición de armas de fuego en el mercado negro y habían realizado prácticas con ellas.

Contaban, en definitiva, "con determinación para su uso en un potencial atentado terrorista", concluye el Ministerio del Interior.