Retiran del mercado navideño unas 600 toneladas de alimentos fraudulentos

La Guardia Civil ha detenido a 26 personas en varias provincias por comercio ilegal.

La Guardia Civil ha inmovilizado cerca de 600 toneladas de alimentos y más de 500.000 litros de bebidas en una operación para controlar su comercio y distribución ilegal de cara al consumo en las fiestas navideñas, en la que ha detenido a 26 personas.


En las 2.450 inspecciones realizadas en locales de venta y distribución de productos alimenticios y establecimientos hosteleros se han denunciado 1.663 infracciones administrativas, informa hoy el instituto armado en un comunicado.


Entre los alimentos y bebidas inmovilizadas sobresalen los productos típicos en estas fiestas como 12.000 botellas de whisky, 8.000 de ginebra, vodka, licores, carne, pescado y marisco.


Esta campaña tiene por objetivo detectar actividades irregulares en unas fechas donde el incremento del consumo provoca la puesta en el mercado de alimentos que no cumplen con los requisitos de seguridad alimentaria.


Pero también se persigue la falsificación de etiquetados y denominaciones de origen, la adulteración y venta de productos caducados o en mal estado, así como el transporte, distribución y almacenaje de alimentos sin control sanitario o sin respetar otros requisitos legales.


Las infracciones más comunes son la manipulación o carencia de etiquetados, la manipulación de las fechas de caducidad de los productos, el transporte o manipulación de alimentos sin control sanitario, la venta de pescado inmaduro y la conservación de carne o marisco en almacenes clandestinos.


Los controles de entrada y transporte de productos alimenticios por cualquier vía, así como las inspecciones de los establecimientos han sido las líneas de actuación de los agentes.


Entre las actuaciones más destacadas, los agentes del Seprona detuvieron a dos personas en Málaga que utilizaban una nave como matadero ilegal, pero con el sello falsificado de otro matadero legal para identificar carne de chivo que preparaban para su posterior comercio.


En la localidad de Fontellas (Navarra), la Guardia Civil precintó en una nave alquilada por una empresa de conservas 600.000 pilas, 60.515 kilos de comida, y 168.350 litros de bebidas que estaban todas caducadas ante el riesgo de poner esos productos en el mercado.


También en Ronda (Málaga), los agentes se percataron de que una empresa de despiece de aves tiene cedidas a otras dos empresas dos cámaras frigoríficas y de congelación para almacenamiento de productos cárnicos, pese a no tener autorización para almacenamiento, por lo que intervinieron 500 kilos y 260 cajas de embutidos y quesos.


Ante esta situación, la Guardia Civil recomienda a los consumidores comprar en sus establecimientos habituales, revisar la fecha de caducidad de los productos y desconfiar de precios anormalmente reducidos y que se alejen del coste normal del producto.


También aconseja que en caso de dudas sobre el producto se pregunte sobre su procedencia y características a los responsables del establecimiento y que cuando consuma en establecimientos en los que no suele hacerlo, compruebe que el etiquetado del producto está en alguna lengua oficial de España.