ECOLOGÍA

Los centros de cría en cautividad del lince marcan un nuevo record con el nacimiento de 18 cachorros

El programa de cría en cautividad del lince ibérico ha marcado un nuevo record con la supervivencia de 18 cachorros en lo que va de año. Se trata además de la primera temporada en la que se consigue el desarrollo de los cachorros fuera de Doñana, ya que siete de los animales han nacido en las instalaciones de Sierra Morena. Los expertos creen que en otoño se podrán poner en libertad los primeros ejemplares para que se críen en su hábitat natural.


Con estos nuevos nacimientos, son ya 78 los linces que permanecen en los centros de cría en cautividad dispuestos en El Acebuche (Doñana), La Olivilla (Sierra Morena), y el Zoobotánico de Jerez de la Frontera, implicados en el programa de protección del felino más amenazado del planeta que llevan a cabo la Junta de Andalucía y el Gobierno Central desde 2003. Los responsables del programa de conservación ex-situ subrayan que con estos nacimientos "se va dos años por delante de los objetivos señalados", y manifiestan su esperanza de que el próximo otoño se pueda realizar la primera suelta de ejemplares para recolonizar antiguos territorios linceros, que se había programado para 2010. Asimismo, también se adelantaría el envío de ejemplares a Portugal, donde en breve se inaugurará un nuevo centro de cría en cautividad, de ahí la importancia de empezar a trabajar en la preparación de hábitats para proyectos de reintroducción.


Según informaron fuentes del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, once de los cachorros supervivientes permanecen en el centro de El Acebuche. Los otros siete proceden de tres hembras que habitan en La Olivilla, un centro inaugurado el pasado año y que cuenta con 42 ejemplares.


Los responsables del plan subrayaron que es la primera vez que una hembra nacida en cautividad logra sacar adelante a su camada, un hito especialmente destacable al tratarse de una pareja subadulta de solo dos años. Desde el inicio de este programa, en diciembre de 2003, la Junta de Andalucía ha proporcionado 29 linces capturados en la naturaleza, que se suman a los siete que estaban ya en cautividad, bien en centros de cría o en centros de recuperación. En total, son 36 los ejemplares del programa de cría que provienen de las poblaciones silvestres (Sierra Morena y Doñana), frente a los 42 nacidos en cautividad. Los ejemplares silvestres son vitales precisamente para conseguir en cautividad una buena representación genética de la variabilidad que existe en la naturaleza, según fuentes del MARM, que destacan además la protección de la diversidad biológica del monte mediterráneo que conlleva la conservación del lince ibérico.


En este sentido, el Gobierno central trabaja ya en la construcción de un nuevo centro de cría en cautividad del lince ibérico en Zarza de Granadilla (Cáceres), para el que se ha destinado 5,5 millones de euros y con el que se pretende aumentar la disponibilidad de hábitats para estos animales.