Macron ofrece a Córcega avanzar hacia la "autonomía" e impulsar el idioma corso

El presidente de Francia ha visitado la isla coincidiendo con el octogésimo aniversario de la expulsión de los nazis.

El presidente francés, Emmanuel Macron, se dirige a la Asamblea de Córcega en Ajaccio, como parte de una visita de tres días a la isla, en el sur de Francia.
El presidente francés, Emmanuel Macron, se dirige a la Asamblea de Córcega en Ajaccio, como parte de una visita de tres días a la isla, en el sur de Francia.
Associated Press/LaPresse

El presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha formalizado este jueves en una simbólica visita oficial a Córcega su oferta para que la isla pueda tener "autonomía" dentro del conjunto del país y medidas que permitan favorecer el desarrollo de la lengua corsa, por ejemplo mediante el bilingüismo del sistema educativo.

Macron ya había lanzado gestos al nacionalismo corso tras las protestas provocadas por el asesinato en prisión en marzo de 2022 de Yvan Colonna, condenado a cadena perpetua por el asesinato de un prefecto en 1998. Su muerte derivó en una ola de protestas sin precedentes recientes y elevó la tensión política.

En un discurso este jueves ante el Parlamento de Córcega, y describiendo el momento como "histórico", el mandatario galo ha llamado a abrir "una nueva etapa" para incorporar a Córcega dentro de la Constitución, con el objetivo de que haya ya un proyecto sobre la mesa en un plazo de seis meses, informa la cadena BFM TV.

Quiere que en este tiempo los políticos locales consensúen un texto, antes de elevarlo al debate nacional. No en vano, una modificación constitucional como la que ha planteado Macron requiere del respaldo de tres quintas partes del Parlamento, por lo que el pacto previo entre nacionalistas y la oposición conservadora se antoja imprescindible para evitar potenciales disputas en París.

La meta es una "autonomía", ha explicado Macron, que no sea "ni contra el Estado ni sin el Estado" y que se quedaría por debajo del estatus de los territorios de ultramar y lejos en cualquier caso de la independencia. Córcega "necesita más libertad", según sus propias palabras.

El presidente espera que estos avances permitan "anclar plenamente a Córcega en la República y reconocer su singularidad", lo que implicaría poner en valor ciertos aspectos autóctonos -"especificidades", ha apuntado- como el idioma corso, que no está considerada lengua cooficial en el territorio. Quiere que "la lengua pueda enseñarse mejor y estar en el centro de la vida de cada corso", con un servicio público de enseñanza que tienda hacia el bilingüismo.

Macron ha hablado en Ajaccio ante una Asamblea controlada por los nacionalismo, que por boca de algunos de sus líderes también han reconocido que se avecina un hito inédito. La presidenta de la Asamblea, Marie-Antoinette Maupertuis, ha emplazado al presidente de Francia a tomar las riendas para resolver "años de conflicto".

En la misma línea, el presidente del Consejo Ejecutivo de Córcega, Gilles Simeoni, ha dado por sentado que el momento de sellar la autonomía "ha llegado", si bien también ha llamado a "no olvidar" mientras "se curan las heridas".

Primera visita desde 2020

Macron ha visitado la isla coincidiendo con el octogésimo aniversario de la expulsión de los nazis y, de hecho, ha aprovechado para rendir homenaje a símbolos de esta liberación. Se trata de la cuarta visita a Córcega desde su llegada al Elíseo, si bien es la primera desde el año 2020.

El protagonismo de Córcega en la escena política nacional ha variado durante las últimas décadas, con presidentes como Jacques Chirac y François Hollande que optaron por no implicarse y otros como Nicolas Sarkozy y François Mitterrand que sí abordaron el tema. De hecho, Mitterrand ya ofreció un "estatus especial" a la isla.

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