La desigualdad entre hombres y mujeres pone "en riesgo" el desarrollo económico mundial

La ONU ha advertido que la brecha de desigualdad aumenta cada ves más.

El Fondo de Población de Naciones Unidas (UNFPA, por sus siglas en inglés) ha advertido este martes de que la brecha de desigualdad entre hombres y mujeres -en especial en materia de derechos reproductivos- aumenta cada vez más, poniendo "en riesgo" el cumplimiento de los objetivos de la agencia para el desarrollo de Naciones Unidas para 2030.

Durante la presentación del Informe sobre el Estado de la Población Mundial 2017 realizado por la UNFPA en Madrid, Luis Mora, responsable de Género, Derechos Humanos y Cultura de dicha agencia, ha resaltado este martes la importancia que tiene combatir las desigualdades para potenciar el desarrollo económico de los países más pobres.

"El punto clave del informe es que las desigualdades -en especial en lo que se refiere al acceso a salud reproductiva- a las que hacen frente las mujeres tienen un impacto muy grave sobre el desarrollo sostenible y económico de muchísimos países", ha asegurado Mora. "Si no se invierte en acabar con este problema, los objetivos de la agenda de cooperación están en riesgo", ha añadido.

En el documento, titulado 'Mundos Aparte: La salud y los derechos reproductivos en tiempos de desigualdad', la UNFPA ha puesto de relieve que a medida que desciende la pobreza a nivel global, la brecha entre ricos y pobres cada vez es más grande.

De acuerdo con la agencia de Naciones Unidas, la riqueza agregada de las 2.500 personas más ricas excede al PIB combinado de más del 80 por ciento de los países del mundo. "Esta situación supone un desastre humanitario y convierte la brecha en un abismo que separa a los ricos de los pobres", ha apuntado Morta.

Según el representante de la UNFPA, asegurar que las mujeres tienen completo acceso a la educación, las oportunidades laborales y los servicios de salud supone un "imperativo moral, social y económico".

Por su parte, el director de Cooperación Multilateral, Horizontal y Financiera de la AECID, Borja Reginfo, ha subrayado la idea propuesta por Mora. "No se trata de un tema sólo de justicia social, sino de productividad. Se está desaprovechando un potencial económico enorme al dejar a las mujeres a un lado", ha señalado.

Por último, el presidente de la FPE, Guillermo Gónzalez Antón, ha hecho hincapié en el llamamiento de la UNFPA. "Nos está diciendo, con datos en la mano, que si no se hace frente con urgencia a la desigualdad que sufren las mujeres -en especial las que están en mayor situación de pobreza- estaremos expulsando de una vida digna a una parte muy importante la población mundial", ha asegurado.

"La penalizacion de ser mujer"

El nuevo informe de la UNFPA advierte de que en el último año la brecha de desigualdad entre hombres y mujeres aumentó en 34 países. Según Mora, existe una "penalización por ser mujer" a nivel global, que se traduce en una mayor falta de acceso a los servicios más básicos para las mujeres.

"Al final ser mujer, y en especial ejercer los derechos reproductivos que esto conlleva, se penaliza en todos los ámbitos posibles", ha apuntado.

La UNFPA estima que menos del 50 por ciento de las mujeres del mundo tiene un empleo remunerado y de media, cobran un 23 por ciento menos que los hombres. De todas aquellas mujeres que trabajan, cerca del 60 por ciento carecen del derecho a baja por maternidad.

"Trabajar y ser madre al mismo tiempo parece ser motivo de castigo, especialmente para las mujeres más desfavorecidas. Si encima le sumamos factores como ser mujer pobre, indígena o adolescente, la situación es mucho peor", ha apuntado.

Por otro lado, la falta de servicios conexos, como guarderías a precios asequibles, impide que las mujeres busquen empleo fuera de casa y como consecuencia, que aumenten sus posibilidades de mejorar su situación económica.

El acceso limitado a servicios de planificación familiar y a anticonceptivos se traduce en que un 43 por ciento de los embarazos no deseados a nivel mundial -89 millones- se producen en países en desarrollo.

En la mayoría de estos países, las mujeres más pobres son también las que menos posibilidades tienen de acceder a servicios de atención prenatal y de acabar dando a luz sin asistencia un personal médico cualificado, lo que pone en riesgo su vida. De acuerdo con el informe, las adolescentes de renta baja tienen hasta 3 veces más posibilidades de sufrir un embarazo no deseado que las que viven en países desarrollados.

"A mí me ha impresionado personalmente el hecho de que hay 128 países en los que existe un impedimento jurídico que obstaculiza el desarrollo económico de las mujeres", ha destacado Mora. En un total de 18 países, los hombres pueden impedir que las "mujeres a su cargo" ya sean sus esposas, hermanas o madres, trabajen fuera de casa si lo desean.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión