​La ayuda humanitaria llega a Yemen en medio de bombardeos

Dos barcos han llegado con el equipo médico necesario para atender a los heridos del conflicto.

Los anti houthi protestan en las calles de la ciudad yemení de Taiz
Foto de archivo
Reuters

La ayuda humanitaria comenzó a llegar este miércoles a Yemen, a cuya ciudad meridional de Adén llegaron dos barcos de Médicos Sin Fronteras (MSF) y el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), cargados de equipos médicos preparados para atender a los heridos en el conflicto.


Ninguna de las partes ha aceptado el tan reclamado alto el fuego humanitario que permita repartir la ayuda, aunque, según confirmaron ambas organizaciones, los dos buques llegaron en perfectas condiciones tras pasar toda la noche viajando.


El barco de MSF partió de Yibuti y va cargado con 1,7 toneladas de provisiones médicas de urgencia que serán utilizadas en el hospital que la organización dispone en la ciudad de Adén, dijo en una conversación telefónica con Efe el responsable de MSF para el Yemen, Pablo Marco.


"La situación es escalofriante", añadió Marco desde Ammán, donde gestiona el futuro envío de más material y equipos médicos.


Según Marco, la necesidad más urgente en Adén es "garantizar que los hospitales puedan seguir funcionando", por lo que es vital que se pueda enviar más ayuda humanitaria para que MSF tenga provisiones para su hospital, que ha tratado ya a más de 600 heridos.


"Esperamos que este barco sea el primero de muchos barcos y aviones" que lleguen al Yemen, agregó.


Para ello, deberán superar las dificultades que implica obtener los permisos de la coalición árabe que bombardea a los hutíes y también los de las autoridades yemeníes en tierra. Estos últimos varían entre los seguidores del presidente Abdo Rabu Mansur Hadi, y los rebeldes chiíes.


El responsable de MSF detalló que esas autorizaciones se van "poco a poco" solucionando, pero que además surgen otros contratiempos como la situación de seguridad y el hecho de que muchas compañías aéreas "no quieran poner sus aviones a disposición de las organizaciones internacionales".


Por su parte, el barco del CICR llegó a Adén también desde Yibuti con un equipo médico y material sanitario listos para llevar a cabo "cirugía de guerra" en los hospitales de la localidad, dijo a Efe por teléfono la portavoz de la organización en Yemen, Marie Claire Feghali.


"La prioridad ahora son las necesidades médicas, ya que para el agua y comida podemos responder de momento", añadió Feghali, que calificó la situación humanitaria en el país de "extremadamente complicada".


Ambos responsables afirmaron que sus organizaciones tienen preparados más equipos para ser enviados al país, a la espera de poder mandarlos.

Hoy, se retrasó la llegada de un avión del CICR procedente de Ammán, que Feghali espera que aterrice "en las próximas 48 horas".


El pasado día 4, el CICR pidió un alto el fuego humanitario de 24 horas para facilitar la llegada de ayuda humanitaria, que todavía no se ha producido.


Feghali señaló que su organización continúa en contacto con "todas las partes del conflicto" para que tenga lugar el ansiado cese de hostilidades.

"No podemos parar una guerra, pero queremos que los civiles y la dignidad humana sean respetados, además de que la ayuda humanitaria pueda seguir llegando", subrayó la portavoz del CICR en el Yemen.


Asimismo, el portavoz de la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) para el Yemen, Erich Orgoso, dijo a Efe desde Ammán que su organización también ha pedido a todas las partes del conflicto que permitan el acceso de ayuda.


Además, señaló que la crisis humanitaria en el país ya existía antes del conflicto, aunque este ha agravado la situación.


"Antes de esta escalada teníamos un plan de rescate para el que necesitábamos 745 millones de dólares; con la situación actual, las necesidades van a aumentar", subrayó.


La situación humanitaria no es urgente solo en la ciudad de Adén, donde "barrios enteros llevan varios días sin agua ni electricidad", continuó Marco, sino también en varias localidades vecinas y en todo el país.


Hoy, al menos 27 personas murieron en bombardeos de la aviación de la coalición árabe contra la sede de la televisión yemení en la capital, Saná, que está en manos del movimiento de los hutíes.


Los heridos son residentes de un edificio de diez plantas situado al lado de la sede de la televisión Al Masira, que supuestamente era el objetivo inicial del ataque, pero que no fue alcanzado por los bombardeos, según pudo verificar Efe.


Con estas nuevas víctimas mortales, la cifra total de fallecidos no deja de subir.


Este martes, la Organización Mundial de la Salud (OMS) informó de que al menos 549 personas han muerto y otras 1.707 han resultado heridas desde el pasado 19 de marzo, cuando los hutíes bombardearon el Palacio Presidencial de Adén, donde estaba refugiado Hadi, antes de huir a Riad.