Rusia avala los resultados de los comicios separatistas ucranianos
Moscú llama a Kiev y los separatistas a entablar un diálogo sobre la base de los acuerdos de Minsk.
Rusia manifestó su respeto a los resultados de las elecciones separatistas celebradas el domingo en las zonas controladas por los rebeldes prorrusos de las regiones ucranianas de Donetsk y Lugansk.
"Respetamos la voluntad popular de los habitantes del sureste (de Ucrania). Las elecciones en Donetsk y Lugansk transcurrieron en general de manera organizada y registraron una alta participación", informó la Cancillería rusa en un comunicado.
Moscú llama a Kiev y los separatistas a entablar un diálogo sobre la base de los acuerdos alcanzados en septiembre en Minsk, y se muestra dispuesto a cooperar de manera constructiva con la comunidad internacional para el arreglo de la crisis en el país vecino.
Además, Rusia se muestra "dispuesta a cooperar constructivamente" con la comunidad internacional "para el arreglo de la crisis en Ucrania".
Mientras Rusia mantuvo desde un principio que las elecciones en las zonas rebeldes permitirán a los insurgentes elegir democráticamente a sus interlocutores en las negociaciones con el Gobierno central de Kiev.
Kiev considera que la ley de autogobierno que concede a los insurgentes tres años de autonomía ya contemplaba esa posibilidad al convocar elecciones locales en las zonas rebeldes para el 7 de diciembre.
Por su parte, Occidente considera que las elecciones separatistas ponen en peligro la aplicación de los acuerdos de Minsk, que contemplan, entre otras cosas, una declaración de alto el fuego y la creación de una zona desmilitarizada.
Las autoproclamadas repúblicas populares de Donetsk y Lugansk convocaron elecciones para elegir a sus líderes y a los integrantes de sus legislativos (Soviet Supremos).
Según los primeros datos, en los comicios del domingo han salido reelegidos los actuales líderes separatistas de Donetsk, Alexandr Zajárchenko, y de Lugansk, Ígor Plotnitski.
En cuanto a la participación, ésta ha superado el millón de votantes, cuando la población de ambas regiones antes de la guerra superaba los 7 millones de habitantes.
Y es que, a diferencia de los referendos separatistas de mayo, ahora, tras cuatro meses de guerra, los rebeldes únicamente controlan un tercio del territorio de ambas regiones