INVESTIGACIÓN

Los Mossos estrechan el cerco sobre el asesino del anciano de Torrente hallado en Lérida

El hombre, de 84 años, fue encontrado sin vida el domingo en una finca de Massalcoreig con múltiples golpes.

En la pared izquierda se observan los restos de sangre que quedaron en el almacén tras el suceso.
Los Mossos estrechan el cerco sobre el asesino del anciano de Torrente hallado en Lérida
DIARI SEGRE

Los Mossos d'Esquadra han estrechado en las últimas horas el cerco en torno al presunto asesino de Esteban Moret, el vecino de Torrente de Cinca, de 84 años de edad, que en la tarde del pasado domingo apareció muerto con evidentes signos de violencia en una finca de la vecina localidad leridana de Massalcoreig.


Al parecer, la investigación policial está ya "muy avanzada" y se espera resolver el caso, que se encuentra bajo secreto de sumario, en los próximos días. En este sentido, las pesquisas se han centrado principalmente en el entorno de la víctima. En el momento de ocurrir los hechos se encontraba en la finca en compañía de su única hija y de su yerno, propietario de la partida agrícola.


No obstante, otra de las hipótesis que se ha barajado como móvil del crimen -aunque parece que ha ido perdiendo fuerza- es el robo. Así, en un primer momento la familia sugirió la posible participación en el asesinato de alguno de los 'ocupas' que se habían refugiado durante algún tiempo en la caseta de la finca, que al parecer se encontraba semiabandonada hasta hace unos meses, cuando, tras el fallecimiento de la madre del yerno, se había revitalizado.


De hecho, según comentaron en Torrente, este era el primer año que la víctima participaba en las labores agrícolas. Precisamente, el domingo se encontraba en compañía de sus familiares recogiendo aceitunas. Al parecer, mientras la hija y su marido se dedicaban a esta tarea en el campo, Moret permanecía en el interior del almacén de la hacienda, situada a apenas un kilómetro de Massalcoreig y próxima al camino que une esta localidad con Fraga.


Una barra de hierro

En un momento dado, cuando sus familiares regresaron a la masía, no lo encontraron allí, por lo que iniciaron la búsqueda. Poco después, lo hallaron en una pequeña arqueta de riego, en la que no había agua y que está situada a unos 60 metros del almacén.


No obstante, desde el primer momento se descartó que el hombre hubiera sufrido una caída fortuita, como confirmaron fuentes de los Mossos, que indicaron que "todos los indicios apuntan a una muerte violenta". Uno de ellos es la presencia de sangre en las inmediaciones del depósito, lo que hace suponer que el asesino o asesinos habrían trasladado hasta allí al vecino de Torrente tras darle muerte. También había manchas de sangre en el interior del almacén, por lo que parece que fue allí donde sucedieron los hechos. Además, en el lugar los investigadores descubrieron una barra de hierro, posible arma homicida.


Al parecer, le golpearon en la cabeza, donde presentaba varios hematomas que eran claramente "incompatibles con una caída".


El aviso del suceso lo dieron los propios familiares y se da la circunstancia de que, a pesar de estar en Lérida, llegó al 112 de Aragón, que movilizó a la Policía Local de Fraga, a los Bomberos de la Comarca del Bajo Cinca y a la Guardia Civil, que tras acordonar la zona y comprobar que la finca se encontraba al otro lado del límite provincial, trasladaron la alerta a los Mossos d'Esquadra, quienes se hicieron cargo de las investigaciones. También se desplazaron inicialmente efectivos del 061 de Fraga, y fue el médico el que confirmó que no se trataba de una muerte accidental.


Esteban Moret estaba jubilado de una compañía eléctrica y, tras quedarse viudo, vivió solo durante un tiempo hasta que, hace 4 o 5 años, su hija y su yerno se trasladaron a su casa. "No se prodigaba mucho por el pueblo, era muy hogareño y tenía una relación normal con todos los vecinos", recordó ayer el alcalde de Torrente de Cinca, Evaristo Cabistañ. "Queremos que se resuelva pronto el caso para que vuelva la tranquilidad al pueblo, porque este tipo de sucesos generan cierta alarma", reconoció el primer edil.


Esta tarde, a las 16.00, se celebrará el funeral por el fallecido, que tendrá lugar en el pabellón polideportivo de Torrente, puesto que la iglesia se encuentra cerrada por las obras de restauración que se están llevando a cabo.