ARTE SACRO

El juzgado de Huesca se inhibe en favor de Lérida en las querellas por los bienes

El abogado de Peralta y Berbegal recurrirá esta decisión

huesca. El Juzgado de Instrucción número 4 de Huesca se ha declarado incompetente en el caso de las dos querellas criminales interpuestas por los ayuntamientos de Berbegal y Peralta de Alcofea contra el obispo de Lérida por la presunta apropiación indebida de tres bienes religiosos procedentes de estas parroquias que se encuentran en depósito en Cataluña y que fueron reclamados el pasado mes de enero por el entonces obispo de Huesca, Jesús Sanz. El abogado de los municipios afectados, Jorge Español, ya ha anunciado que recurrirá esta decisión.

Tras pedir un informe a la Fiscalía sobre la competencia territorial, la jueza ha dictado un auto en el que estima que el juzgado que debe conocer este asunto es el de Lérida, por ser allí donde se encuentran retenidas las obras: el frontal de El Salvador de la colegiata de Berbegal, la tabla de San Pedro y la Crucifixión de Peralta y la portada de la antigua iglesia de El Tormillo (núcleo de Peralta).

Según Español, "dicha doctrina no es acorde con la jurisprudencia del Tribunal Supremo, que estima que el juzgado competente en estos casos sería tanto Lérida como Huesca, lugar este último donde se deben reintegrar los bienes a las parroquias escindidas del obispado de Lérida".

Así, y aún "respetando en todo momento la resolución judicial", el letrado que defiende los intereses de los ayuntamientos presentará un recurso de apelación ante la Audiencia de Huesca "para que corrija el criterio del Juzgado al respecto".

Cabe recordar que los alcaldes de Berbegal y Peralta decidieron acudir a los tribunales para reclamar la vuelta de las tres piezas tras conocer la respuesta negativa del obispo de Lérida, Joan Piris, a su homólogo, alegando que el levantamiento del depósito dependía de la Generalitat y del resto de instituciones que forman parte del Consorcio del Museo Diocesano y Comarcal de Lérida, donde están dos de las obras.

Precisamente, en la querella se pedía como medida cautelar el secuestro de las piezas por la Guardia Civil para dejarlas en depósito judicial en el Museo Diocesano de Huesca.