El sacerdote ha explicado en rueda de prensa, después de que esta mañana se haya dado a conocer su nombramiento como obispo de Huesca y Jaca, que es "consciente de que hay un problema" en esta cuestión.

Ahora, espera que el administrador apostólico de las Diócesis de Huesca y Jaca, Jesús Sanz, le comunique "información" y, a partir de marzo, "momento en el que esté directamente en Huesca y Jaca, afrontaré esta cuestión".

Monseñor Julián Ruiz tomará posesión como obispo de Huesca el próximo día 5 de marzo, y, más adelante, en una fecha todavía por concretar, de la Diócesis de Jaca, algo que para él supone "un honor y una satisfacción, al mismo tiempo que una responsabilidad, compromiso y servicio".

El sacerdote ha comentado que la cuestión de los bienes de estas dos parroquias ha sido uno de los asuntos que ha abordado "tangencialmente" con el presidente de Aragón, el socialista Marcelino Iglesias, con quien ha desayunado este jueves.

Al respecto, ha comentado que "la relación con la autoridades de la Comunidad, provinciales y locales es siempre muy afectuosa" y el desayuno ha sido "distendido", con una conversación "amistosa y cordial" y "hemos tenido ocasión de hablar" de diferentes asuntos y de la historia de Aragón.

"Felicito a la Comunidad Autónoma y a mí como aragonés porque es un presidente que conoce la realidad de Aragón y nuestra historia", ha dicho.

Monseñor Ruiz Martorell también ha expresado su opinión sobre los bienes de la Diócesis de Barbastro-Monzón (Huesca) en depósito en el Museo de Lérida y ha señalado que "en un futuro no muy remoto se puede alcanzar una solución satisfactoria".

El sacerdote ha agregado que confía "en que el Señor disponga los corazones de todos para que se alcance lo que es una justa reivindicación" y ha señalado que su opinión en esta materia "brota del sentido común".

Situación de la diócesis

Monseñor Ruiz Martorell ha reconocido que no conoce pormenorizadamente la situación de ambas diócesis y que espera que el anterior obispo de Huesca y Jaca y actual administrador apostólico de ambas diócesis le dé a conocer "los puntos de emergencia pastoral y conocimiento" de ellas.

El nuevo obispo de Huesca ha enviado ya un escrito pastoral a los fieles de ambas diócesis, a quienes ha deseado "gracia y paz" y en la que aborda diferentes cuestiones, como el problema del paro.

Al respecto, ha comentado que la Doctrina Social de la Iglesia es "clara" en esta materia, "pero no solamente nos movemos en el nivel de los principios, sino que la cuestión del paro nos concierne a todos".

Según ha señalado, en su propia familia "hay personas en paro" y "es un problema que golpea nuestra sensibilidad" y al que "entre todos tenemos que dar una respuesta ética, pero con una ética que sea amiga de las personas".

"Estamos llamados a una convergencia de esfuerzos para resolver entre todos esta crisis económica que se hace ya larga, extensa y que debe tener para todos una luz y una perspectiva de solución", ha concluido.