El tramo de calzada romana que ha quedado al descubierto en las obras de la Autovía del Duero, en su tramo entre Venta Nueva y Santiuste, corresponde a la vía romana XXVII, que unía Uxama con Numancia y Augustóbriga, y data de finales del siglo I o principios del II, según indicaron desde el Ministerio de Fomento, citando fuentes de la empresa arqueológica que ha elaborado el informe, actualmente en manos de la Dirección General de Patrimonio de la Junta de Castilla y León para su estudio.

Uno de los aspectos más destacados que recoge el análisis hecho por los arqueólogos se refiere a su estado de conservación, que apunta que la calzada, situada a poca profundidad, ha sufrido "una fuerte erosión en todas las capas que tenía". No en vano, indican desde Fomento, son más de 2.000 años los que la calzada ha permanecido más o menos cubierta por otras capas y el camino actual se halla justo sobre ella.

La datación de la calzada, que hacía el recorrido entre los actuales El Burgo de Osma, Soria y Ágreda, se ha calculado a finales del siglo I por estimar que es la época de consolidación del modelo de ocupación romana del territorio.

Protección

Desde el Ministerio de Fomento destacan que la calzada, cuya presencia ya era conocida en el inicio de las obras de la autovía, se protegerá, en virtud de lo que manifieste la Dirección General de Patrimonio, que cuenta desde hace tres semanas con el informe arqueológico para decidir cómo actuar. "El Ministerio pondrá todo de su parte para aplicar todas las condiciones técnicas que garanticen el mejor mantenimiento", apuntaron las mismas fuentes.

El seguimiento arqueológico de las obras ya estaba previsto en la declaración de impacto ambiental del proyecto, cuya ejecución se adjudicó en julio de 2009 por un coste total de 75 millones de euros.

Entonces se estableció un detallado mecanismo de tapado con geotextil para proteger la calzada, que fue hallada en las obras el pasado mes de febrero. Desde la Subdelegación de Gobierno en Soria apuntaron en su momento a un desembolso cercano al millón de euros en una actuación con el fin de proteger la vía romana. Dado su valor se determinó que los camiones no podrían acceder a las obras a través de los caminos rurales que coincidan con ella.