El ladrón que se hizo selfis con los móviles de sus víctimas, condenado a 9 años

La Policía recuperó los teléfonos que sustrajo a dos mujeres y halló archivos con fotos que se había hecho a sí mismo.

La funda de Marilyn lo delató. El acusado se retrató en un ascensor con un móvil cuya dueña lo identificó sin dudarlo.
La funda de Marilyn lo delató. El acusado se retrató en un ascensor con un móvil cuya dueña lo identificó sin dudarlo.

Ali Sinera, de 24 años y aficionado a retratarse con los móviles que robaba a sus víctimas, pasará a una larga temporada en la cárcel. La titular del Juzgado de lo Penal número 4 lo acaba de condenar a nueve años y cuatro meses de prisión: siete como autor de dos robos con intimidación utilizando un instrumento peligroso –una botella rota y un objeto punzante–, más dos años y cuatro meses por un tercer asalto en el que no llegó a usar ningún arma.


De nada sirvieron sus explicaciones de que los dos teléfonos robados que la Policía intervino en su poder se los había dado un amigo que está irregular en España para que los vendiera. La juez dio total credibilidad a las víctimas y considera probado que Ali Sinera es el autor de los tres asaltos con intimidación que sufrieron otras tantas mujeres en Zaragoza durante los días 26 de marzo y 3 de abril pasados.


El primero lo cometió en la calle de Pedro Arnal Cavero, donde de madrugada amenazó con una botella rota a una joven que regresaba a su casa y le obligó a entregarle sus pertenencias. Una semana después, en apenas una hora atracó a dos mujeres, una en la calle de Escultor Morato y otra en Tenor Fleta. A todas les quitó sus bolsos y se apropió de tarjetas, dinero, documentación y dos teléfonos.


Días después, vendió los móviles en una tienda de objetos usados, donde los recuperó la Policía con archivos que contenían fotos que se había hecho a sí mismo. Una de las imágenes más reveladoras fue una –con gesto retador– que se hizo en un ascensor con espejos en el que se le veía claramente retratándose con un teléfono móvil cuya dueña lo identificó sin ningún genero de dudas por la llamativa funda con el rostro de Marilyn Monroe. En otras, Ali Sinera salía en actitud cariñosa con la que parecía ser su novia.


Para la juez, aunque el acusado sostuvo su inocencia en todo momento, no cabe ninguna duda de que el autor fue él. Todas las pruebas lo señalan y las víctimas lo reconocieron tanto en las fotografías como en el juzgado.

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