¿Quién es Álvaro Soláns, el nuevo presidente de Pikolin?

Álvaro Soláns (Zaragoza, 1980) sabía el pasado sábado que su nombramiento como presidente del grupo Pikolin era inminente. El que ejerce desde este miércoles como primer ejecutivo de la multinacional de productos del descanso participaba en el hotel Petronila con su padre y con su hermano en una de las mesas redondas del XIX Encuentro Nacional del Fórum Familiar, que reunió en Zaragoza a 350 jóvenes miembros de familias empresarias procedentes de toda España.

En ese foro, en una mesa titulada ‘Cuando la familia cuida de la empresa’, Álvaro reconoció el peso que el apellido supone para las nuevas generaciones de la empresa, y el hecho de tener por delante los grandes referentes que para él habían supuesto su abuelo y su padre, un reto que, dijo, aborda con ilusión y responsabilidad. Aquel era un aviso a navegantes: la tercera generación de la familia Soláns estaba a cuatro días de tomar el control de la compañía. Su hermano Borja, por su parte, aseguró que el largo plazo y el compromiso personal han sido fundamentales para incorporar la cultura familiar a las filiales asiáticas del grupo. Alfonso, padre de ambos, recordó en su intervención que la labor de todo buen empresario es ir preparando las bases para que las nuevas generaciones accedan al complejo mundo de la gestión, al tiempo que aseguró que al final, la decisión más complicada siempre es “decidir quién va a dirigir el barco”.

El nuevo presidente de Pikolin, segundo hijo de Alfonso Soláns, es diplomado en Empresariales por la Universidad de Salamanca, licenciado en Administración y Dirección de Empresas por la Universidad Antonio de Nebrija y MBA por el IE Business School. Su trayectoria profesional es muy internacional. En 2006 se trasladó a Estados Unidos para trabajar en Serta, marca de colchones líder en ese país y de la que Pikolin había sido licenciataria para Europa. Dos años después, en 2008, volvió a Zaragoza para desempeñar el puesto de consejero adjunto de la dirección en Pikolin SL. En 2010 se trasladó a París para trabajar en Cofel, filial francesa de la firma aragonesa, donde fue adjunto a la dirección general. En 2012 retorna a España ya como vicepresidente del grupo y desde entonces ha ido asumiendo más responsabilidades y funciones de representación.

Casado y padre de dos hijas, los que trabajan con él destacan su carácter afable y su interés en todo lo que concierne a un grupo con retos de crecimiento muy importantes.