El temor de los agricultores a los graves daños que la sequía está produciendo en los cultivos aragoneses ya tiene cifras. Los primeras estimaciones las ha realizado la organización agraria Asaja-Aragón, que calcula que las pérdidas que la ausencia de lluvias han provocado en las producciones de cereal de invierno en la Comunidad ascienden a 110 millones de euros. Y es que, según sus previsiones, la campaña, que comienza dentro de apenas tres semanas y de la que se esperaba una alta producción, podría sufrir una reducción de entre 650.000 y 750.000 toneladas respecto a la de 2016, que alcanzó cifras récord al superar los 2,7 millones de toneladas.

"Teruel y Zaragoza están arruinadas", señaló ayer con contundencia el vicepresidente de Asaja Aragón, Fernando Luna, que insistió en la crítica situación que viven los cerealistas de la zona sur y centro de la provincia zaragozana y la totalidad de Teruel, donde en comarcas como el Jiloca o las Cuencas Mineras ni siquiera van a entrar las cosechadoras porque el 100% del cultivo está perdido. Luna lamentó además que estas zonas arrastran ya dos campaña consecutivas de sequía, por lo que la situación de los agricultores y los ganaderos es "particularmente dramática".

El representante de Asaja, que llevará estas previsiones a la asamblea nacional de la organización agraria que se celebra el martes y en la que se estudiarán las posibles medidas a solicitar al Ministerio, detalló que si no llegan las precipitaciones la producción de los secanos zaragozanos oscilará entre 0 y 700 kilos por hectárea. "Solo a las faldas del Moncayo y en las altas Cinco Villas las cosechas presentan un mejor aspecto, con lo que se podría llegar a obtener una producción media", matizó Luna.

El panorama en Teruel es más que preocupante, según los cálculos de la organización aragonesa. Se habla de pérdidas generalizadas de entre el 75% y el 85%, unos porcentajes que incluso alcanzan al 100% en los cultivos del Jiloca y las Cuencas Mineras.

Huesca es la única provincia aragonesa que presenta mejor cara, a pesar de que los cultivos también se han visto perjudicados por pedriscos y heladas puntuales, todavía por cuantificar. Y aun con mejores perspectivas, las previsiones realizadas por Asaja Aragón apuntan a un descenso de la producción altoaragonesa de entre 100.000 y 150.000 toneladas respecto al total recogido el pasado año en esta provincia.

Si llegan las lluvias...

Luna recordó que estas previsiones "tienen fecha de 16 de mayo", porque, dado que quedan todavía quedan unas tres semanas para que se inicie la recolección, la llegada de precipitaciones podría aminorar los daños ahora estimados. "En caso de llegar alguna lluvia se podría hablar de un posible repunte en las producciones, siempre dependiendo del estado vegetativo del cultivo", puntualizó el representante de la organización agraria.

Advirtió, sin embargo, que en cultivos como la cebada, la llegada de precipitaciones, como las que anuncian para hoy las previsiones meteorológicas, "no harán nada", excepto en zonas altas de las Cinco Villas o en Sobrarbe y Jacetania. Situación muy diferente se presenta en los cultivos de trigo donde el agua podría dar un respiro a la cosecha.

Con estos datos en la mano Asaja presentará el desolador escenario que la sequía está dejando en el campo español ante el Ministerio de Agricultura, cuya titular ya ha dejado claro que no habrá ayudas directas porque "todo lo que es asegurable, no es subvencionable".

Una afirmación ante la que Luna realizó una precisión. En su opinión, y en la de Asaja, los seguros agrarios podrían ser las mejores herramientas para hacer frente a este tipo de situaciones pero siempre que "sean reales, a precios asequibles y con coberturas adaptadas a cada zona y cultivo". Un aspecto en el que "todavía tenemos que trabajar mucho, mucho, mucho", señaló.

Asaja defiende además que a través de Saeca (Sociedad Anónima Estatal de Caución Agraria) los agricultores tengan acceso a créditos blandas de hasta 50.000 euros por explotación así como que la minoración de módulos sea computable en la declaración de la Renta que se está presentando ahora.