Márquez es nuevo líder de un accidentado mundial

El español Marc Márquez (Repsol Honda RC 213 V), a pesar de cumplir su primera jornada como piloto de MotoGP en el campeonato del mundo no tuvo ningún problema en demostrar este fin de semana, en el Gran Premio de Alemania disputado en Sachsenring, que era capaz de asumir la responsabilidad de líder de la mejor manera posible, ganando.

Cierto es que la edición 2013 del mundial está resultando muy accidentada y que una vez más Jorge Lorenzo (Yamaha YZR M 1) sufrió una caída que le obligó a viajar de vuelta a España, ahora para no regresar como en la "machada" de Assen (Holanda), y que cuando su rival Dani Pedrosa (Repsol Honda RC 213 V), aunque callado y esforzándose en asegurar que él iba a seguir en la misma línea, veía ante sí el camino expedito hacia una ampliación de su ventaja en la tabla del campeonato, todo cambió con una brutal caída.

Lesionados Lorenzo y Pedrosa la responsabilidad pareció recaer, como así fue, en un debutante en la categoría, aunque un debutante de la talla de Marc Márquez, quien no se amilanó ante la experiencia de todo un Valentino Rossi (Yamaha YZR M 1) ni frente a la ambición del "tocado" Cal Crutchlow (Yamaha YZR M 1).

El británico sufrió durante el fin de semana un par de caídas, la segunda de ellas le dejó severas abrasiones tanto en la mano derecha, la del acelerador y el freno de su Yamaha, como en una pierna y el costado, pero éste tampoco se arredró e intentó sacar el máximo rendimiento posible. La segunda plaza fue la recompensa.

Márquez lo bordó y dejó claro que puede ser, perfectamente, aspirante al título mundial en su primer año, aunque sin desdeñar que con Lorenzo y Pedrosa en pista "las cosas no son tan fáciles"; opinión que comparten tanto Rossi como Crutchlow, por lo que será interesante ver qué sucede dentro de siete días en el carismático y especial circuito de Laguna Seca.

La vida no podía ser tan dura para la familia Torres, que en 2006 perdió a su hijo mayor Rubén en un trágico y espeluznante accidente en el circuito de Montmeló durante una carrera del campeonato de España de Supersport y ésta quiso que el "pequeño" Jordi, todo simpatía e ilusión de vivir, se encontrase con lo que nunca habría soñado en su primera temporada al completo: la victoria.

Jordi Torres hizo unos entrenamientos casi perfectos y sólo al final el belga Xavier Simeón le arrebató su derecho al mejor tiempo de entrenamientos, pero el de Rubí (Barcelona) no se arredró y espero la oportunidad en la carrera, sabedor de que su ritmo era bueno y ¡vaya si lo era!

Desahuciado el líder, el británico Scott Redding (Kalex), quien da preocupantes síntomas de debilidad, Pol Espargaró (Kalex) era el referente de Jordi Torres (Suter), por eso, nada más apagarse el semáforo rojo, dejó hacer a su rival para colocarse detrás de él y estudiarlo, toda una lección de profesionalidad y experiencia que le reportó pingües beneficios, los del vencedor.

¿Qué mejor manera de acercarse a las posiciones de cabeza que con una victoria como primer gran resultado?

Quien también dio una lección de veteranía fue Alex Rins, cansado de que tanto Luis Salom como Maverick Viñales le doblegasen en la última vuelta en anteriores carreras, en esta ocasión no se dejó sorprender por ellos y cuando el líder del mundial -Salom- dio el esperado tirón, el joven Rins no se amilanó y la jugada le salió perfecta.

Seguro que insistirá en próximas citas, aunque ahora tanto a Moto2 como a Moto3 les toca descansar hasta mediados de agosto, cuando se dispute en el Brickyard Motor Speedway el Gran Premio de Indianápolis.