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Una SD Huesca reconocible tras años de innovaciones más o menos fallidas

La multinacional Nike había vestido a los azulgranas las dos últimas temporadas y, antes, Kelme entre 2018 y 2021 y Bemiser durante 13 años.

Con su nueva equipación, la SD Huesca da un giro a la tendencia de las últimas temporadas, en las que con el patrocinio técnico de Kelme entre 2018 y 2021 y de Nike las dos últimas campañas se emprendieron a menudo caminos marcados por la innovación. Unos cambios más o menos afortunados con los que el nuevo diseño rompe, pues este remite a los cursos previos al ascenso en Lugo, cuando vestía al club azulgrana otra marca aragonesa, Bemiser, de la que ahora toma el relevo Fútbol Emotion a través de la firma de nueva creación Soka.

La relación con la multinacional norteamericana presentó el mayor inconveniente de unos diseños impersonales, de catálogo, con escaso margen para que contuviesen símbolos apegados al club altoaragonés. En el curso 21-22 se optó por un difuminado azulgrana en el que se diluyó una identidad que ahora se ha recuperado. Al año siguiente, se presentó un patrón de bandas azules y granas con una tonalidad más brillante. Además, se recuperaron la cruz de San Jorge y el color verde, que este curso se van a retomar con el sello propio de Soka y, en el segundo caso, un tono puramente laurentino.

Para el debut en la élite, con la firma española Kelme, se apostó por tres anchas bandas, grana, azul y grana, en diagonal como un guiño a la disposición del escudo y a la trayectoria ascendente en que se encontraba el club. Un año después, las franjas se verticalizaron cambiando la sucesión de colores a azul, grana y azul. Para la segunda experiencia en la máxima categoría, sobre un fondo azul se incluyó una cruz de San Jorge grana. Además, Kelme, que presentó problemas de abastecimiento, lanzó una camiseta especial con motivo del día de San Jorge 2021 con una franja de cada color y el rojo y amarillo de la bandera sobre los hombros.

Antes, la SD Huesca mantuvo una larga relación con la firma aragonesa Bemiser que se prolongó entre 2005 y 2018. Un periodo de tránsito que llevó a la entidad de Segunda B a Segunda División, con el nacimiento del actual proyecto y una querencia por diseños clásicos que vivió como principal hito la elástica con la cruz de San Jorge. Vio la luz en 2008, con el ascenso a la categoría de plata, y desde entonces ha conocido once diseños diferentes si se cuenta el curso 2023-24. Otro de los diseños más recordados es el que se lanzó en 2010 con franjas horizontales para celebrar el centenario del fútbol en la capital oscense. Antes, había lucido firmas como Medea, Bemiser en anteriores etapas, Jugui, Rasán o Meyba. Nombres vinculados a un club más artesanal, lejos del fútbol de élite.

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