Los servicios jurídicos de la SD Huesca solicitaron este viernes de manera formal a la Fiscalía de la Audiencia Provincial y ésta a su vez al juzgado número 5 de la capital oscense el sobreseimiento de su causa dentro de la Operación Oikos en la que la entidad estaba siendo investigada como persona jurídica por su posible responsabilidad penal. La decisión se tomó apoyándose en las declaraciones realizadas el jueves por el fiscal jefe de Huesca, Juan Baratech, en las que llegó a afirmar que el club altoaragonés podría llegar a ser "el primer perjudicado".

"La Sociedad Deportiva Huesca aparece como responsable, pero es una responsabilidad penal que procede del artículo 31 Bis del Código Penal, que es una responsabilidad de las personas jurídicas. Para que se pueda exigir una responsabilidad penal a una persona jurídica tiene que ser por actuaciones que ha realizado un representante y que haya actuado siempre en beneficio, directo o indirecto", explicó, añadiendo que "lo que hemos visto, por ahora y sin perjuicio de lo que luego salga en las actuaciones, es que la Sociedad Deportiva Huesca podría ser incluso una perjudicada".

A este respecto, desde el club se es optimista acerca de que el archivo se apruebe la semana que viene. De hecho, Manolo Torres, en su primera comparecencia como nuevo consejero delegado, abrió su intervención ofreciendo a la Justicia el trabajo y la colaboración de la SD Huesca y la cerró deseando que su próxima intervención fuese para anunciar que la entidad ha quedado apartada del procedimiento que está llevando a cabo el juez Ándel de Pedro. Llegados a este punto, el club incluso podría abogar por personarse como acusación particular cambiando de forma radical su posición en la causa sobre la trama de los amaños de partidos.

Por el momento se mantiene el secreto de sumario y se espera que sigan produciéndose nuevas declaraciones y comparecencias a lo largo de los próximo días.