“Ni antes éramos tan malos ni ahora tan buenos”. Con esas palabras, el lateral del Real Zaragoza, Diego Rico, se ha referido a la situación del equipo, asegurando que se ha entrado en una “buena dinámica” y que tan solo falta dar “el último empujón” hacia el ascenso.

Rico ha justificado las dos caras opuestas mostradas ante Mirandés y Valladolid, diciendo que los primeros “se encontraron con un gol que supieron defender encerrados atrás y nosotros no supimos reaccionar”, mientras que los pucelanos “nos dejaron más espacios y estuvimos más cómodos”.

Sobre el encuentro del próximo domingo ante Las Palmas y el amargo recuerdo del partido de ida, donde cayeron derrotados por 5-3 dando una mala imagen, ha señalado que, pese a no tener ánimo de revancha, “el equipo está con ganas de demostrar que vive un momento mejor que por aquel entonces e intentaremos hacerlo lo mejor posible y nos dejaremos la vida”.

Además, ha dado especial importancia a cerrar la clasificación para el 'play off' este mismo domingo, ya que serviría para “recuperar efectivos y descansar” de cara a las eliminatorias.

También ha habido espacio para hablar de su situación personal y de la mejoría evidenciada en las actuaciones pasadas: “Los pitos que escuché en algún momento son una motivación extra para seguir trabajando. Trabajo día a día sin pensar en nada más, ya que en el fútbol un día estás arriba y otro abajo”. En ese sentido, ha querido agradecer el apoyo recibido por parte de sus compañeros y técnico y ha valorado positivamente el hecho de que en los últimos partidos se le de más libertad para sumarse al ataque actuando de carrilero, donde se siente “cómodo”.