Bosnia vigila a Eldin

Técnicos de la selección de Bosnia-Herzegovina han seguido los últimos partidos del extremo del Zaragoza.

Eldin, uno de los futbolistas del momento en el Real Zaragoza, elevado por Tato y Borja Bastón.
Bosnia vigila a Eldin
Oliver Duch

La fuerza con la que Eldin Hadzic ha arrancado la temporada -dos goles y cuatro asistencias-, su imponente adaptación al Zaragoza y sus más recientes demostraciones de juego han activado la alerta en la Federación de Fútbol de Bosnia-Herzegovina, el país en el que nació hace 23 años y que tuvo que abandonar con apenas unos meses empujado por la guerra de los Balcanes.


Técnicos federativos han seguido con atención los últimos partidos del extremo zaragocista, recabando informes para el seleccionador Safet Susic, quien ya contempla el nombre de Eldin Hadzic como uno de los futuribles para el combinado nacional bosnio. El propio futbolista ya conoce estas intenciones a través de sondeos realizados en las últimas fechas desde la federación bosnia. 


Eldin Hadzic nació en 1991 en Kljuc, al oeste del país independizado en 1992. Su familia debió abandonar Bosnia al poco de iniciarse los primeros combates y de que incluso su padre, de etnia musulmana, fuera recluido en el campo serbio de prisioneros de Manjaca. Salió al exilio hacia Alicante gracias a la Cruz Roja y allí creció Eldin, como un español más, aunque la nacionalidad no la consiguió hasta 2013. Ahora puede elegir jugar con Bosnia o con España. 


Su proceso de nacionalización fue complejo y largo, pues Eldin nació en plena desintegración de Yugoslavia, solo seis meses antes de que Bosnia-Herzegovina se declarara país independiente, generando eso una incertidumbre jurídica que retrasó su proceso.


Después de esos trámites, solo goza de la nacionalidad española. No obstante, puede recuperar la familiar en cuanto desee, por nacimiento en territorio bosnio y por derechos de sangre, más aún si es seleccionado por Safet Susic. A día de hoy, lo cierto es que tanto España como Bosnia pueden convocarlo. 


El próximo partido de Bosnia es el 16 de noviembre en Israel, encuentro clasificatorio para la Eurocopa de Francia 2016. La selección balcánica ha perdido por lesión a Ibisevic, una de sus estrellas, y la delantera es una de las plazas peor cubiertas. En ese contexto, ha aflorado el nombre de Eldin, aunque es poco probable que Susic, vieja estrella del fútbol yugoslavo en los años 80, convoque aún a Eldin. De momento, ya maneja su nombre entre los posibles para los siguientes compromisos, fechados en marzo en el calendario internacional. 


Es obvio que Eldin tiene la internacionalidad mucho más accesible por Bosnia que por España. Él nunca ha manifestado preferencias.


Sí disponibilidad. Hace unos días, ante su buen comienzo de Liga en España, fue entrevistado por ‘Klix’, un medio de comunicación bosnio y fue contundente: "Ya se hablaba de que podía ir el año pasado, pero nunca me contactaron. Me encantaría jugar para el país donde nací. Mi familia se siente de allí y sería muy bonito".


"Hay muchos grandes jugadores en el equipo de Bosnia-Herzegovina, como Miralem Pjanic", agregó el jugador del Zaragoza, quien, por cierto, nunca ha regresado a su país de nacimiento.


La captación de futbolistas en la diáspora bosnia es unos de los ejes del reclutamiento de la Federación. Las circunstancias históricas, sociales y demográficas del país hacen que esta multiétnica selección se nutra fundamentalmente de jugadores que partieron de niños a países como Alemania, Canadá, Suiza. O nacidos en otros estados de padres bosnios emigrados.