Se acabaron las pruebas y los experimentos. Tras más de un mes de intenso y arduo trabajo, el Heliodoro Rodríguez López marca la primera de las 42 paradas que, como mínimo, le aguardan al Real Zaragoza en su nueva andadura en Segunda División. El conjunto aragonés estrena su quinto curso consecutivo en la categoría de plata en el maltrecho césped de un Tenerife que a punto estuvo de consumar el ascenso el año pasado (perdió en la última eliminatoria ante el Getafe). Pero, además de con la intención de capturar los primeros tres puntos de la competición, el renovadísimo equipo de Natxo González tratará de romper la estadística de 36 temporadas ininterrumpidas sin debutar con un triunfo a domicilio en la primera jornada de liga, independientemente de la categoría.

Hay que remontarse hasta la 80-81 para encontrar la última victoria como visitante del Real Zaragoza en un estreno liguero. Fue en el viejo San Mamés, ante el Athletic, donde el conjunto zaragozano, dirigido entonces por Manolo Villanova, salió victorioso gracias a un solitario gol del inolvidable Pichi Alonso en la segunda mitad. Además del infalible delantero, en aquel equipo militaban futbolistas de la talla del argentino Jorge Valdano o Víctor Muñoz, el último técnico que levantó un título con el escudo del león sobre su pecho. Aquel 7 de septiembre de 1980, el conjunto aragonés fijó un precedente que este viernes (22.00), casi 40 años después, tratará de reemplazar la plantilla de Natxo González.

A punto estuvo de lograrlo en la 15-16 el Real Zaragoza de Ranko Popovic en Miranda. Un gol de Leandro Cabrera en la segunda parte encaminó un triunfo que Abdón Prats arrebató a los aragoneses a solo nueve minutos de la conclusión. De esa forma, los zaragozanos regresaron de su primer desplazamiento de la temporada con un empate. Mismo botín que en los dos cursos anteriores. La 14-15, con Víctor Muñoz en el banquillo, el Real Zaragoza saldó sin goles su visita al estadio Nuevo Colombino de Huelva. Un año antes, en la 13-14, el equipo de Paco Herrera tampoco pasó de la igualada, esta vez a un tanto, contra el Hércules en el estadio Rico Pérez de Alicante.

De las cinco temporadas seguidas que acumula la entidad en Segunda, solo en una no inició la competición a domicilio. Y, curiosamente, a falta de lo que ocurra este Viernes, fue la única en la que sumó una victoria. Fue ante el UCAM Murcia en La Romareda, con el turolense Luis Milla a los mandos. Entonces, un solvente 3-1 ante un recién ascendido multiplicó exponencialmente la ilusión en una temporada que, sin embargo, poco a poco iría complicándose hasta límites prácticamente inimaginables.

Acotando el espacio de tiempo hasta la última década, el balance tampoco es muy alentador. De hecho, en ese periodo el Real Zaragoza acumula dos triunfos en sus últimos diez arranques de competición. Además del ya citado ante los murcianos, en la 09-10, de la mano de Marcelino García Toral, el conjunto aragonés se deshizo, también al calor de su afición, del que será su rival este viernes: el Tenerife. Un solitario tanto de Arizmendi bastó para que la victoria se quedara a orillas del Ebro.

Una temporada antes, con el entrenador asturiano en el banquillo, el Real Zaragoza arrancó el curso en Segunda con una derrota ante el Levante (2-1). Lo que no le impidió, varios meses después, consumar el ascenso a Primera División. Idéntico objetivo por el que pelea actualmente la plantilla de Natxo González. Un equipo que este viernes tratará de solucionar su particular tarea a domicilio.